Tegucigalpa – En un pronunciamiento que ha sacudido el escenario político hondureño, Jorge Cálix, anterior miembro de la resistencia del Partido Libertad y Refundación (Libre), ha cuestionado los criterios selectivos en la aplicación de justicia por parte del Ministerio Público (MP). El presidenciable enfatizó la necesidad de equidad en la persecución judicial, especialmente en casos donde existen evidencias documentadas.
Cálix puso en el centro del debate la situación de Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta Castro, señalando la existencia de videos que lo vincularían con actividades ilícitas. «Hay más pruebas de las vinculaciones del cuñado de la presidenta con el narco que las que hemos visto en este caso», afirmó el candidato, cuestionando la falta de acción judicial en este asunto.
La controversia se intensifica ante la pérdida del expediente forense en el caso de Isis Obed Murillo, lo que genera dudas sobre la base probatoria que sustenta la detención de Vásquez Velásquez. Cálix sugiere que esta situación podría ser el inicio de una serie de acciones judiciales dirigidas contra figuras políticas de la oposición, incluyendo potencialmente a miembros del Partido Nacional y Liberal.
El candidato liberal hizo referencia también al caso de David Chávez, expresidente del Partido Nacional, quien fue detenido sin un requerimiento fiscal previo, para ilustrar lo que considera un patrón de parcialidad en la administración de justicia. «Cuando unos estamos sometidos a la ley y otros están por encima de la ley, es cuando la cosa no está bien», sentenció.
La intervención de Cálix ha añadido una nueva dimensión al debate sobre la independencia judicial en Honduras, en un momento crítico para la institucionalidad democrática del país.