Tegucigalpa – El comisario Cristian Nolasco sobrevivió a un peligroso encuentro con miembros de la familia Amador en Catacamas, Olancho, donde su rápida actuación y el apoyo de la Policía Nacional evitaron una potencial tragedia.
El incidente, que quedó documentado en video, revela los riesgos que enfrentan las fuerzas del orden en zonas conflictivas del país.
En una entrevista exclusiva con HRN, el comisario Nolasco detalló cómo se enfrentó a un grupo de aproximadamente 50 personas fuertemente armadas que bloqueaban una calle frente a una posta policial.
La situación se tornó crítica cuando varios individuos, bajo los efectos del alcohol y las drogas tras 48 horas de vigilia por la muerte de un familiar, intentaron desarmarlo.
«La decisión de grabar surgió porque, segundos antes, estuve a punto de perder la vida», explicó Nolasco, quien se vio forzado a forcejear para mantener el control de su fusil durante el enfrentamiento. «Lo único que evitó que me disparara fue que yo neutralizara la situación», agregó.
El incidente se complicó aún más por la proximidad a una iglesia donde había más personas armadas y por la reluctancia de algunos oficiales a seguir órdenes debido al miedo.
«Algunos policías no me querían cumplir las instrucciones. No sabían qué hacer o estaban con miedo», reveló el comisario.
La respuesta institucional fue decisiva para controlar la situación. La Dirección de la Policía Nacional desplegó rápidamente apoyo aéreo y terrestre, movilizando cerca de 200 efectivos a la zona.
«Sabíamos que estábamos enfrentando una situación de homicidio múltiple inminente», señaló Nolasco.
Con 24 años de experiencia en las Fuerzas Especiales, el comisario Nolasco mantiene su compromiso con la justicia a pesar de las amenazas y los intentos de difamación.
«Recuerdo siempre el lema de mi formación: ‘Hacer justicia, aunque el mundo perezca'», concluyó, reafirmando su determinación de continuar su labor en una de las zonas más conflictivas del país.