Tegucigalpa – Un acto de violencia manchó el partido de cuartos de final de la Liga de Naciones entre Honduras y México, cuando el director técnico del combinado azteca, Javier Aguirre, fue agredido por un aficionado al término del encuentro disputado en San Pedro Sula.
El lamentable incidente ocurrió cuando Aguirre se dirigía a saludar a su homólogo hondureño, Reinaldo Rueda, tras la victoria local por 2-0. Un objeto lanzado desde las gradas impactó en la cabeza del estratega mexicano, causándole una herida que requirió atención médica inmediata.
«Eso no puede volver a suceder, ni aquí, ni en ningún estadio de Honduras, ni en ningún estadio del mundo», expresó visiblemente consternado el técnico hondureño Rueda, quien enfatizó la gravedad del hecho recordando que «así como golpearon al ‘profe’, me hubieran podido golpear a mí».
La Concacaf reaccionó con firmeza ante el suceso, emitiendo un comunicado donde «condena enérgicamente» la agresión y anuncia la apertura de una investigación a través de su Comisión Disciplinaria. «La seguridad de los equipos y de los aficionados es una prioridad para la Concacaf. Este tipo de comportamientos violentos no tienen cabida en el fútbol», señaló el organismo rector del fútbol regional.
A pesar de la gravedad del incidente, que empañó el encuentro deportivo, el propio Aguirre intentó restar importancia al suceso, manteniendo una actitud profesional ante la situación. Sin embargo, la Concacaf ha dejado claro que tomará las medidas necesarias para evitar futuros incidentes similares en sus competiciones.
