Tegucigalpa – El consejero del Consejo Nacional Electoral (CNE), Marlon Ochoa, compareció este viernes ante la Comisión Especial de investigación del proceso electoral primario del Congreso Nacional, donde ofreció su versión sobre las irregularidades registradas durante los comicios internos del 9 de marzo.
Durante su intervención, Ochoa contradijo abiertamente a la presidenta del organismo, Cossette López, y señaló directamente a ella y a la consejera Ana Paola Hall como responsables de los retrasos que derivaron en problemas logísticos.
Al inicio de su presentación, Ochoa intentó relativizar las dificultades ocurridas durante el proceso electoral, asegurando que «tuvimos un problema de distribución tardía de maletas en dos municipios, pero en 296 municipios se desarrolló con tranquilidad, con normalidad y éxito total».
El funcionario, que representa al partido oficialista Libertad y Refundación (Libre) en el CNE, destacó además el aporte tecnológico implementado para garantizar la transparencia del proceso.
En lugar de enfocarse inmediatamente en explicar las causas del retraso de más de 200 maletas electorales —motivo principal de su convocatoria—, Ochoa dedicó parte de su intervención a cuestionar las recientes declaraciones de la presidenta López sobre la supuesta imposibilidad de realizar las elecciones generales en noviembre.
Según el consejero, estas afirmaciones «han provocado incertidumbre y zozobra y no reflejan la postura del pleno», exigiendo que la funcionaria rectifique o aclare sus declaraciones.
Entrando al tema del caos electoral del 9 de marzo, Ochoa señaló que «hacia las 11 de la mañana se habían distribuido las maletas electorales de 24 mil 468 Juntas Receptoras de Votos (JRV), equivalentes al 99.1% del total de JRV», para luego afirmar categóricamente que «las maletas llegaron tarde porque se despacharon tarde». Según su explicación, «es imposible que una maleta llegara a las 5:30 de la mañana si se despacha a las 9:35 de la mañana», añadiendo que los envíos se realizaron «en desorden».
El consejero, quien también fue ministro de Finanzas, identificó tres momentos críticos que desembocaron en los problemas logísticos: demoras en la publicación del pliego de condiciones, retrasos en la entrega de los diseños para la impresión de papeletas, y complicaciones en la recepción de las mismas.
En cada uno de estos puntos, Ochoa responsabilizó directamente a los despachos de las consejeras López y Hall, asegurando que tardaron 24 días en responder a consultas cruciales mientras que su despacho fue el primero en hacerlo.
Entre los datos revelados por Ochoa, destacó que apenas 31 días antes de las elecciones, el CNE seleccionó a las empresas encargadas de imprimir más de 15 millones de papeletas, evidenciando la premura con que se realizaron procesos fundamentales para garantizar la correcta ejecución de los comicios.
Esta comparecencia profundiza aún más la crisis institucional en el seno del CNE, justo cuando se incrementan las dudas sobre la capacidad del organismo para organizar las elecciones generales previstas para el 30 de noviembre.
