Tegucigalpa – El diputado del Partido Nacional, Antonio César Rivera Callejas, ha expresado su preocupación sobre el próximo retorno a sesiones del Congreso Nacional tras las vacaciones de medio año.
Según su criterio, los desacuerdos políticos persistentes en el panorama actual indican que es probable que continúen sin lograr una productividad legislativa significativa.
Rivera Callejas ha señalado que, durante este mes de junio, los miembros de la Junta Directiva del Congreso Nacional no han mantenido una comunicación digna con la principal bancada de oposición para informar sobre los temas que se abordarán en las próximas sesiones.
Esta falta de diálogo y transparencia contribuye a la incertidumbre sobre la agenda legislativa.
El diputado también ha manifestado su desconocimiento acerca de la ratificación del acta referente a la adhesión de Honduras a la Cooperación Andina del Fomento (CAF) y ha expresado su curiosidad por conocer la postura que adoptará el oficialismo frente a este tema.
Esta falta de información y claridad sobre decisiones importantes genera interrogantes sobre la capacidad del Congreso para abordar asuntos de relevancia nacional.
Rivera Callejas ha lamentado la creciente ola de inseguridad que atraviesa el país y ha cuestionado la falta de convocatoria de una sesión de emergencia para abordar esta problemática.
Su preocupación radica en que los líderes de este poder del Estado no hayan demostrado la capacidad de actuar de manera ágil y eficiente para hacer frente a un problema tan apremiante.
En cuanto a las próximas sesiones legislativas, el diputado nacionalista ha expresado su pesimismo, anticipando que no se logrará avanzar en la discusión de temas importantes para el país. La falta de diálogo y consenso entre las fuerzas políticas dificulta la posibilidad de alcanzar acuerdos significativos en la legislatura.
En resumen, el Congreso Nacional se enfrenta a un panorama desafiante, marcado por la falta de comunicación, los desacuerdos políticos y la incertidumbre sobre la agenda legislativa.
Estos elementos contribuyen a generar dudas sobre la capacidad del Congreso para abordar los problemas prioritarios del país y cumplir con su función legislativa de manera efectiva.