Por: José Eliécer Palomino Rojas.
¿Por qué medir en Colombia, con el mismo rasero a las instituciones educativas públicas y privadas con las Pruebas Saber ICFES?
Después de una brumosa pandemia, para recuperar los efectos sociales, psicológicos, económicos y morales, en donde muchas familias quedaron sin empleo, encierro, luto y miseria; la licenciada Jhoana Paéz desde el templo del saber donde labora, como docente del área de español, le nació el interés de orientar y motivar a sus estudiantes de grado once, y así prepararlos para la vida y mitigar un poco la tristeza, el estado melancólico que abrigaban en los corazones de cada estudiante, en el inicio del año escolar de 2022. Con la motivación inyectada por la docente, los estudiantes acoplaron creativas herramientas y escenarios muy sobrios para exponer la interpretación de su temática teatral.
Por otra parte la profesora Paéz de la institución educativa María Josefa Marulanda, del territorio Antioqueño Colombiano, mencionó durante la exposición de la obra que asignó a sus estudiantes: “Los estudiantes no son sabios, ni expertos, en lo que se refiere a teatro o en literatura, pero que quizá sí, amantes de las dos esencias, con una buena y excelente dedicación, preparación y orientación.”
Seguidamente añadió la educadora: “lo más importante para ella es que, sus estudiantes participantes desde el comienzo, se animaron con la propuesta, para llevar a los educandos y al público general de la institución educativa, La obra es “Macbeth” de William Shakespeare. año 1623, siglo XVll época del Renacimiento.
Cabe resaltar que, estas prácticas teatrales en las instituciones educativas públicas o privadas, permiten a los adolescentes explorar, expresar sentimientos, valorar y subir en alto grado las habilidades y destrezas comunicativas, académicas y actitudinales en el contexto de apoyo con espíritu de familiaridad y seguridad.
Ante las anteriores prácticas teatrales, con habilidades y destrezas comunicativas, cognitivas, actitudinales, sería bueno que el gobierno y el Ministerio de Educación Colombiano, plantearan un cambio en el modelo de evaluación de las Pruebas Saber 11 ICFES debido que en cuanto al contexto de familiaridad, muchas familias no logran o no les alcanzan desde su mísero salario que devengan, cubrir el costo de los simulacros de las Pruebas Saber 11 ICFES que entidades privadas de forma inmisericorde aprovechan su agosto, año tras año, en cobrar un valor por estudiante, según estas entidades, la módica suma de 300.000= Pesos Colombianos, como asesoría y preparación a la minoría de estudiantes que logran pagar dicho servicio y que desde tales simulacros repiten y repiten los mismos temas que los estudiantes reciben de sus instituciones educativas.
Citando a Gloria Bernal, Codirectora de LEE y profesora del Departamento de Economía de la Universidad Javeriana “Los buenos puntajes en algunos colegios oficiales responden a que seguramente tienen docentes muy buenos que halan el rendimiento hacia arriba, cuentan con rectores o directivos responsables y comprometidos” “Es probable que también tengan recursos económicos, salas de computador y conexión a internet”. “Hay departamentos con colegios que no tienen acceso, agua, no cuentan con electricidad.”
Ante el aporte de Gloria Bernal en parte tendría razón, pero creería que respecto a la evaluación de las Pruebas Saber 11 ICFES con el mero hecho de evaluarlos con el mismo rasero, se estaría cometiendo grandes injusticias e inequidad en aquellos estudiantes, docentes, de las instituciones educativas publicas que en pleno siglo XXI y de forma hiriente los tildan de malos, cuando no ven ni conocen la verdadera realidad en la que vive cada estudiante, padre de familia y docente dentro de cada territorio.
Al analizar una de tantas de las dimensiones con las que se tienen en cuenta en las Pruebas Saber 11 ICFES para evaluar a los estudiantes, como la dimensión de la docencia: “Contiene el nivel educativo de los docentes y el tamaño promedio de curso por cada docente” en la cual dimensión de docencia muchas instituciones no cuentan con capacitaciones y preparación de los docentes, pero en cambio sí se aprecia el elevado número de estudiantes por curso, a lo cual no es igual una institución que cuente en cada curso con 20 o 25 estudiantes a otra que posea por cada grupo 53 o 54 estudiantes.
¿Será que se podría pensar en una verdadera y transparente inversión de recursos y asistencialismo en salud y educación, para que las familias, estudiantes y docentes colombianos, logren el derecho a llevar una vida digna con excelentes resultados sin necesidad de pagar el elevado costo de los 300.000= pesos, sino más bien solo pagar los $52.500= que cada estudiante debe pagar para presentar las Pruebas Saber Icfes al Estado, aunque no deberían tampoco pagar tal dinero, para que de verdad se constate lo que reza la constitución política de Colombia “ Una educación gratuita”.
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