Tegucigalpa – Un importante operativo policial culminó este miércoles con el desmantelamiento de un laboratorio clandestino de procesamiento de drogas ubicado en el sector de Armenta, en la zona montañosa del Merendón, San Pedro Sula, en el norte de Honduras.
La intervención, resultado de varias semanas de seguimiento a información de inteligencia, permitió a los agentes de la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO) localizar con precisión este centro de operaciones delictivas.
Sin embargo, al momento de ejecutar el allanamiento, los uniformados fueron recibidos con disparos por parte de dos individuos que custodiaban el inmueble.
Tras un breve enfrentamiento, las autoridades lograron someter y capturar a los dos sospechosos, identificados con los alias «El Abuelo» y «El Flaco», quienes según información oficial son miembros activos de la estructura criminal MS-13.
Durante la inspección del lugar, los agentes encontraron que la vivienda funcionaba como un sofisticado centro de procesamiento de estupefacientes. El hallazgo más significativo fue un considerable cargamento de sustancia blanca, presuntamente cocaína, que se encontraba lista para ser empacada y distribuida.
El comisionado Selvin Valle, presente en el operativo, detalló que la droga estaba almacenada en tres barriles con capacidad de 10 quintales cada uno. Según estimaciones preliminares de las autoridades, el volumen total de la incautación se sitúa entre 80 y 100 kilogramos de cocaína.
Los dos detenidos enfrentarán cargos por porte ilegal de armas, asociación para delinquir y tráfico de drogas, delitos que conllevan severas penas dentro del sistema judicial hondureño.
Una oficial de la DIPAMPCO, quien participó en la operación, indicó que las investigaciones han revelado que la organización criminal cuenta con varios puntos estratégicos que sirven como «caletas» para el almacenamiento y distribución de estupefacientes.
Por esta razón, en las próximas horas se realizará un conteo oficial detallado de la droga incautada y se continuarán los operativos en otras ubicaciones identificadas.
Este operativo representa un significativo avance en la lucha contra el narcotráfico en Honduras, especialmente en la región norte del país, que ha sido históricamente afectada por la presencia de organizaciones criminales dedicadas al tráfico de drogas.