Tegucigalpa – La situación legal de la fiscal Francia Medina ha tomado un giro decisivo, ya que tras la audiencia de declaración de imputado, se ha dictado detención judicial en su contra.
La imputación está relacionada con la sustracción de una cuantiosa suma de 88.6 millones de lempiras pertenecientes al Banco Central de Honduras (BCH).
La audiencia, que concluyó en horas de la madrugada, llevó a la jueza a ordenar el traslado de la fiscal a la Penitenciaria Nacional Femenina de Adaptación Social. La próxima instancia judicial será la audiencia inicial, programada para el domingo 3 de diciembre.
La fiscal Francia Sofía Medina, previamente asignada a la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado (FESCCO) en San Pedro Sula, se encuentra vinculada directamente con la sustracción de los fondos decomisados en diversas operaciones de seguridad y del Ministerio Público.
Las investigaciones realizadas por los equipos especiales de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) revelan que la fiscal Medina llevó a cabo los retiros sin informar a las autoridades superiores del Ministerio Público durante los últimos dos años.
Esta conducta motivó un allanamiento en su residencia en busca de más pruebas incriminatorias.
A pesar de contar con una incapacidad médica desde julio de este año, la funcionaria continuó sustraendo fondos del BCH. En dos ocasiones adicionales solicitó devoluciones al Banco Central de Honduras, las cuales se realizaron al margen de los procedimientos administrativos, ya que en ese momento ya no ostentaba el cargo de fiscal de la FESCCO.
Las acusaciones que enfrentará incluyen delitos graves como lavado de activos, abuso de autoridad, sustracción de fondos, destrucción, ocultación o inutilización de documentos en custodia, así como falsificación de documentos.
