Tegucigalpa – En una reciente audiencia inicial, un juez de letras de lo penal decidió tomar medidas diferentes a la prisión preventiva en el caso de un ingeniero acusado de tráfico ilegal de personas.
Identificado como Rafael Alexis Bonilla García, el acusado es ingeniero en ciencias acuícolas y enfrenta un requerimiento fiscal presentado el 29 de enero. Su arresto se produjo al día siguiente durante un allanamiento de morada llevado a cabo por la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Las investigaciones revelan que en el año 2022, Bonilla García habría concertado un acuerdo con un individuo para transportarlo junto con su hijo de dos años hacia Estados Unidos.
Por este servicio, se le habría pagado la suma de 10 mil dólares. Sin embargo, al llegar a Veracruz, México, el imputado supuestamente abandonó a las dos personas, quienes posteriormente decidieron regresar a Honduras.
Durante el allanamiento en la residencia del imputado, las autoridades decomisaron varios elementos, incluyendo un teléfono celular, dinero en efectivo, documentos relacionados con la compra y venta de terrenos, traspasos de vehículos, recibos de depósitos bancarios, y una camioneta.
Estos hallazgos y la decisión del juez reflejan un paso inicial en el proceso judicial que está en curso, arrojando luz sobre las circunstancias del caso y las medidas adoptadas para abordar las acusaciones contra Bonilla García.
