Tegucigalpa – El diputado Antonio Rivera, del Partido Nacional, ha expresado su descontento con la reacción del gobierno del Partido Libertad y Refundación (Libre) a las recientes declaraciones de la embajadora estadounidense en Honduras, Laura Dogu.
Rivera calificó de «intolerante» la decisión de la presidenta Xiomara Castro de iniciar el proceso para denunciar el tratado de extradición con Estados Unidos, en respuesta a comentarios de Dogu sobre la relación del gobierno hondureño con Venezuela.
«Realmente increíble. No son tolerantes a las sanas críticas y tanto que han criticado el narcotráfico, es más esa fue su principal tema de campaña, doble cara de los izquierdistas radicales de Libre», publicó Rivera en su cuenta de la red social X.
Estas palabras reflejan una fuerte división política en el país respecto a cómo manejar las críticas y las relaciones internacionales, especialmente con los Estados Unidos.
La controversia surgió después de que la embajadora Dogu expresara preocupación por una reunión entre altos funcionarios de defensa hondureños y el ministro de Defensa venezolano, a quien Estados Unidos ha señalado de tener vínculos con el narcotráfico.
Poco después, la presidenta Castro respondió a través de su red social que la interferencia de Estados Unidos y su intento de influir en la política hondureña eran inaceptables, lo que llevó a su decisión de denunciar el tratado de extradición.
Esta medida ha intensificado el debate dentro de Honduras sobre la independencia de su política exterior y la mejor manera de gestionar las relaciones diplomáticas, especialmente en un contexto de tensiones regionales e internacionales.
La postura de Rivera y su partido sugiere un conflicto más amplio sobre los valores de soberanía nacional frente a las necesidades de cooperación internacional en la lucha contra el narcotráfico y otros crímenes transnacionales.