Tegucigalpa – La devaluación del lempira frente al dólar estadounidense continúa acelerándose en Honduras, acercándose peligrosamente a la barrera psicológica de los 26 lempiras, según datos oficiales del Banco Central que muestran un incremento de dos centavos en el Precio Promedio Diario en los últimos dos días de esta semana.
De acuerdo con los registros de la subasta de divisas, el precio promedio de compra del dólar pasó de 25.80 lempiras el miércoles a 25.84 lempiras este viernes, mientras que el valor de venta casi alcanza los 25.97 lempiras (25.9694 exactamente). Analistas financieros proyectan que la barrera de los 26 lempiras podría romperse entre el lunes y martes de la próxima semana.
La devaluación interanual se aproxima ya al 5%, representando la mayor caída del lempira desde finales de 2018, cuando la moneda nacional cerró en 24.50 lempiras por dólar (en contraste con los 23.75 lempiras registrados en 2017). Llamativamente, durante la administración anterior, el lempira llegó incluso a apreciarse en 2020, impulsado por la entrada de fondos externos relacionados con la pandemia del Covid-19.
En la actual administración, el 15 de octubre de 2024 el lempira superó por primera vez la barrera de los 25 lempiras, y apenas siete meses después está a punto de rebasar los 26, evidenciando un ritmo acelerado de pérdida de valor.
Liliana Castillo, expresidenta del Colegio de Economistas, advierte que con el actual ritmo devaluatorio este año se superaría el 2.9% registrado en 2024.
La economista destacó que el deslizamiento ha mostrado aumentos diarios entre medio centavo y un centavo, lo que proyecta un valor de 26.7 lempiras por dólar. «Con un mayor ritmo de devaluación el dólar podría acercarse a los 27 lempiras», señaló.
Paradójicamente, este posible año récord de devaluación coincide con un aumento extraordinario de las reservas internacionales brutas, que ya superan los 8,868 millones de dólares y cubren 5.5 meses de importaciones, excediendo la meta de cinco meses establecida en el programa vigente con el Fondo Monetario Internacional.
Economistas han señalado que el impacto positivo en las exportaciones, uno de los principales argumentos para justificar la devaluación, no ha compensado la significativa pérdida del poder adquisitivo del lempira, lo que afecta directamente los ingresos de los hondureños y presiona al alza los precios de productos importados.