Nueva York – En el marco del juicio contra el expresidente Juan Orlando Hernández en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, se ha confirmado la presencia de Devis Rivera Maradiaga, conocido como “El Cachiro”, quien figura como testigo y narcotraficante confeso en este caso, según informes revelados este martes.
Durante el interrogatorio realizado por la Fiscalía, Maradiaga afirmó haber actuado como “informante de la DEA” antes de su arresto. Al ser cuestionado sobre el inicio de su colaboración, indicó que se remontaba a noviembre de 2013, y confirmó la existencia de un acuerdo de cooperación desde enero de 2015.
En sus declaraciones, “El Cachiro” reveló ser responsable de 78 asesinatos y afirmó tener un conocimiento directo de Juan Orlando Hernández, al recordar su trayectoria desde el Congreso Nacional hasta la presidencia de Honduras, refiriéndose a él como “Juan, JOH o Juancho”.
En un giro impactante, Rivera Maradiaga admitió haber sobornado al expresidente Hernández en 2012, entregando la suma de $250.000, que fue enviada a Tegucigalpa a través de su hermana Hilda. Este pago, según sus palabras, buscaba obtener protección para los Cachiros y su hermano Javier, además de asegurar contratos gubernamentales para los negocios de su familia.
Durante el interrogatorio, Devis Leonel Rivera fue confrontado con una fotografía presentada por el fiscal, en la que identificó a Miguel Arnulfo Valle, miembro del clan Valle Valle, junto a Juan Orlando Hernández.
Rivera admitió haberse reunido con Miguel Valle, quien le reveló haber mantenido encuentros con el ahora acusado.
El testigo confirmó su conocimiento sobre figuras del narcotráfico como Nery López Sanabria, alias “Magdaleno Meza”, y su pedido para recibir aviones cargados de cocaína. También reconoció a “Milo”, un sicario del cartel de los Valle Valle, así como a Alexander Ardón, exalcalde de El Paraíso en Copán, entre otros.
En sus declaraciones, Rivera mencionó su vínculo con Hugo Ardón, exdirector del Fondo Vial, y su hermano Alexander, así como con el traficante Byron Ruíz y el excongresista Fredy Nájera, con quienes estuvo involucrado en actividades relacionadas con el narcotráfico.
El testimonio reveló además sus encuentros con el expresidente Porfirio Lobo Sosa, a quien sobornó a cambio de protección, así como la participación del hijo de Lobo, Fabio Lobo, en la facilitación de contratos gubernamentales a cambio de sobornos para su empresa “Inrimar”.
Según Rivera, Fabio Lobo contaba con escolta presidencial debido a su vínculo familiar, lo que le permitía ayudar en el transporte de cargamentos ilícitos.
El narcotraficante detalló cómo el cártel obtenía cargamentos de cocaína desde Colombia, utilizando aviones en pistas clandestinas y camiones con compartimentos ocultos o fondos falsos para su transporte.
Cuando se le cuestionó sobre el general Julián Pacheco Tinoco, Rivera identificó a este oficial como el jefe de seguridad presidencial.
