Tegucigalpa – El portavoz del Cuerpo de Bomberos de Honduras, Nahúm Galo, ha resaltado la importancia de prestar especial atención a la colonia Guillén en la capital hondureña, la cual ha sido afectada recientemente por una falla geológica que ha partido su geografía en dos.
A medida que las lluvias continúan, el Cuerpo de Bomberos se mantiene en alerta máxima y ha exhortado a los residentes de zonas vulnerables, como la colonia Guillén, a evacuar voluntariamente a los albergues designados para su seguridad.
Además de atender una serie de incidencias relacionadas con las lluvias, como inundaciones y caídas de árboles, el enfoque principal se centra en la colonia Guillén. La llamada «zona cero», donde aproximadamente 180 viviendas fueron destruidas, sigue bajo una estrecha vigilancia debido a su clasificación como una zona de alto riesgo.
A pesar de los esfuerzos de prevención, la falta de asistencia gubernamental ha llevado a que muchas familias evacuadas regresen a sus hogares en la zona, aumentando el riesgo de peligro y potenciales situaciones de emergencia.
Las persistentes lluvias han exacerbado los problemas en la colonia, con la acumulación de agua que ha contribuido a la saturación del suelo. Específicamente en este lugar, el más mínimo indicio de saturación podría reactivar la falla geológica, lo que plantea una seria amenaza para la seguridad de los residentes y sus propiedades.
Conscientes de esta situación crítica, el Cuerpo de Bomberos de Honduras se mantiene en una constante vigilancia, trabajando incansablemente para salvaguardar la vida de los habitantes de la colonia Guillén.
