El Reino Unido ha anunciado la prohibición de los cigarrillos electrónicos desechables, que se han hecho populares entre los adolescentes.
Por Euronews
Cuando los cigarrillos electrónicos salieron al mercado, se anunciaron como el menor de dos males, ya que ayudaban a la gente a alejarse de los cigarrillos tradicionales y de los riesgos para la salud asociados al tabaquismo.
Pero en los últimos años, los vapeadores se han convertido en una moda entre los jóvenes. El vape de un solo uso, también conocido como «puff bar», es prácticamente un accesorio, y cada vez son más los adolescentes que lo llevan. Varios países de todo el mundo se plantean prohibirlos para frenar el fenómeno.
Reino Unido
El primer ministro británico, Rishi Sunak, ha anunciado que se prohibirán los vaporizadores desechables en el Reino Unido para frenar el consumo de tabaco entre los jóvenes.
«Se desconocen los efectos a largo plazo del vapeo y la nicotina que contienen puede ser muy adictiva, por lo que, aunque el vapeo puede ser una herramienta útil para ayudar a los fumadores a dejar de fumar, no es aceptable su comercialización entre los niños», declaró Sunak.
Según el gobierno británico, la aplicación de la nueva normativa limitará la variedad de sabores de los vapeadores, introducirá envases sencillos y modificará la presentación de los vapeadores en las tiendas para minimizar su atractivo para los niños.
«Estos cambios dejarán un legado duradero al proteger la salud de nuestros hijos a largo plazo», añadió Sunak, ya que la nueva ley ilegalizará la venta de productos del tabaco a adolescentes menores de 15 años.
Desde el año pasado, en los gobiernos de Escocia y Gales se oyen cada vez más voces que reclaman la prohibición e instan al gobierno británico a tomar medidas.
Su decisión llega tras una consulta sobre tabaquismo y vapeo, que se inició en octubre del año pasado y puso de relieve el aumento de niños y adolescentes entre los consumidores de vapeo.
La medida también tiene consideraciones medioambientales, ya que en el Reino Unido se desechan 5 millones de vapeadores a la semana.
Estados miembros de la UE
Alemania también tiene intención de tomar medidas contra los cigarrillos electrónicos desechables. Algunos ecologistas -entre ellos Steffi Lemke, ministra federal de Medio Ambiente de los Verdes- han ido más lejos y quieren prohibirlos totalmente en la UE.
«Los cigarrillos electrónicos desechables ensucian el medio ambiente y a menudo acaban en la basura doméstica en lugar de eliminarse adecuadamente como aparatos eléctricos», declaró Lemke al periódico alemán Mitteldeutsche Zeitung.
«También pueden causar graves problemas en las instalaciones de eliminación debido a los incendios», añadió.
Incluso Francia, país de origen de todos los tópicos del cigarrillo, anunció medidas enérgicas contra los vapeadores, mientras Bélgica espera la luz verde de la UE para prohibirlos.
Vendidas entre 8 y 12 euros en estancos, páginas web o supermercados, las «caladas» despegaron a finales de 2021 promocionadas en las redes sociales.
Con un contenido de entre 0 y 20mg/ml de nicotina, los cigarrillos electrónicos desechables también fueron criticados por conducir a los jóvenes consumidores hacia los cigarrillos normales.
«Nos pueden decir que no es nicotina. Pero es un reflejo, un gesto al que los jóvenes se están acostumbrando. Así es como se acercan al tabaquismo y tenemos que acabar con ello», declaró la ex primera ministra francesa, Elisabeth Borne, tras anunciar la prohibición.
Una prohibición que ya es efectiva en Australia y Nueva Zelanda
Nueva Zelanda, conocida por sus estrictas directrices antitabaco, cuenta con una prohibición efectiva desde agosto de este año.
El país ha tomado medidas enérgicas contra el vapeo con una nueva serie de normas para proteger a los jóvenes, como un menor nivel de nicotina, menos sabores y prohibir abrir una tienda de vapeo en las proximidades de los colegios.
«Reconocemos que tenemos que encontrar un equilibrio entre evitar que los jóvenes se inicien en el vapeo y disponer de vapeadores como herramienta de deshabituación para aquellos que realmente quieren dejar de fumar», declaró Ayesha Verrall, ministra de Sanidad neozelandesa.
Las restricciones llegan un mes después de que Australia anunciara medidas similares sobre el vapeo, mientras el gobierno acusaba a la industria tabaquera de intentar «enganchar a la nicotina» a la próxima generación de adolescentes.
¿Qué tan malos son los vapes de un solo uso para la salud?
Inventados en 2019, los vapes de un solo uso suelen venir con envases de colores y rápidamente ganaron popularidad entre los adolescentes, primero en Estados Unidos. La tendencia cruzó rápidamente el Atlántico.
El Financial Times informó de que el 14% de los adolescentes ingleses de entre 14 y 17 años usan vapes más de una vez a la semana.
En el resto de Europa, las cifras también están en auge: una encuesta francesa señala que más de uno de cada diez adolescentes ha probado el vapeo.
Los sabores dulces de los cigarrillos electrónicos de un solo uso son el argumento de marketing más convincente para los consumidores más jóvenes.
Según la organización STOP de vigilancia de la industria tabaquera, la combinación de sabores afrutados, envases divertidos y la promoción por parte de personas influyentes en las redes sociales están destinados a captar y enganchar a una nueva generación de usuarios como «fumadores de sustitución».
La encuesta puso de relieve que en Francia, el 17% de los adolescentes utilizaban dispositivos de un solo uso y luego cambiaban a otros productos.
Cada vez hay más estudios que demuestran que los vaporizadores de un solo uso distan mucho de ser inocuos. Al igual que los cigarrillos electrónicos, la mayoría de los vapeadores de un solo uso contienen nicotina, altamente adictiva.
Casi la mitad de los usuarios diarios experimentan efectos secundarios como tos, dificultad para respirar y palpitaciones, informó la organización Drugwatch.
Aunque actualmente se desconoce el alcance de los efectos a largo plazo debido a la falta de investigación médica, un estudio demostró que el uso prolongado de productos de vapeo puede dañar significativamente la función de los vasos sanguíneos del cuerpo, aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
