Tegucigalpa – La embajadora de Estados Unidos, Laura Dogu, resaltó la importancia de fomentar un entorno propicio para la inversión en Honduras, subrayando que sin inversión no se generan empleos, lo que a su vez puede contribuir a la migración de personas en busca de oportunidades laborales.
En una reciente declaración, Dogu expresó su preocupación por el éxodo de hondureños y manifestó el deseo de no ver a más personas migrando desde este país centroamericano.
La diplomática informó que ha mantenido conversaciones con empresarios estadounidenses para explorar vías de mejora en las condiciones de inversión en Honduras. Destacó la colaboración entre Estados Unidos, el gobierno hondureño y el sector privado local para trabajar en la creación de un clima favorable a la inversión extranjera.
A pesar de estos esfuerzos, Dogu subrayó que, en última instancia, la decisión de invertir en Honduras recae en las empresas estadounidenses. Reconoció que mejorar las condiciones laborales y económicas en el país es fundamental para evitar que más personas emigren en busca de mejores oportunidades.
Las cifras del sector empresarial indican que alrededor de 200 mil hondureños emigraron en 2023, mayormente hacia Estados Unidos, en busca de empleo y mejores condiciones de vida.
El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) ha alertado sobre una “grave crisis laboral” en el país, con 2.3 millones de personas enfrentando dificultades para encontrar empleo.
El Cohep ha criticado las condiciones desfavorables para la inversión en Honduras y ha señalado la falta de estímulos que desincentivan la llegada de inversionistas, lo que contribuye a la crisis laboral y al éxodo de la población en busca de oportunidades fuera del país.
La relación entre el gobierno y la empresa privada ha sido objeto de críticas, cuestionando la hostilidad hacia el sector empresarial y su impacto negativo en el desarrollo económico del país.
