Tegucigalpa.- El clamor de diversos sectores de la sociedad hondureña contra la versión del nuevo Código Penal se hizo latente cuando empresarios y obreros del norte de Honduras han solicitado al Congreso Nacional que mejor se redacte otra legislación en esa materia.
Así lo acordaron en una junta celebrada en la norteña ciudad industrial de San Pedro Sula representantes de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC) y la Federación Sindical de Trabajadores Nacionales de Honduras (Fesitranh).
Al respecto, Pedro Barquero, director ejecutivo de la CCIT, señaló que consideran que el nuevo Código Penal es un “enorme retroceso a la lucha contra la corrupción y la impunidad” en Honduras.
El nuevo instrumento legal, actualmente en “vacatio legis” y que deberá entrar en vigencia el 10 de noviembre de este año, limitaría las libertades individuales y colectivas y por eso la petición es que se “abrogue y debemos ponernos de acuerdo en un nuevo Código penal”.
El presidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, confirmó que se escuchará a los sectores que se oponen para que se alcancen las enmiendas antes que el nuevo Código Penal entre en vigencia.
