Tegucigalpa. – Al menos seis fusiles AK-47, tres cargados para fusil Ak-47, cinco pistolas automáticas, dos granadas de fragmentación, un lanza granadas de fabricación casera (con tubos) y al menos 30 libras de marihuana fueron encontradas en las últimas horas durante un operativo de requisa realizado en la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto de Támara.
A primeras horas de la mañana, miembros de las diferentes instituciones que integran la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina), equipados de escáner móviles y detectores de metales ingresaron al centro penitenciario para realizar las respectivas requisas en los módulos de sentenciados II, procesados II y el área denominada “La Isla”.
De manera preliminar se informó, que primero se revisó el módulo sentenciados II, en donde se descubrió una caleta en donde ocultaban al menos 30 libras de marihuana la cual sería distribuida y vendida al interior del módulo, por lo que se realizan las diligencias investigativas para identificar al propietario de la hierba.
La requisa se extendió al sector denominado como “La Isla”, en donde se encontraron enterrados en el área verde, dos fusiles Ak-47, dos cargadores vacíos y un lanza granadas de fabricación casera (elaborada con tubo), el hallazgo se produjo con el equipo especializado para detectar metales.
Con el hallazgo de las armas de grueso calibre, las autoridades continuaron la requisa en el módulo de procesados II, encontrando cuatro fusiles AK-47, un cargador del mismo calibre; cinco pistolas automáticas calibre nueve milímetros, dos granadas de fragmentación, las cuales serían parte de las utilizadas para cometer el ataque en contra de los miembros de Fuerzas Armadas y Policía Militar del Orden Público (PMOP), que se encontraban en los torreones y en el cual resultó herido un sargento que fue trasladado de emergencia al Hospital Militar.
En la operación de requisa, participó personal de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y su departamento de Inspecciones Oculares quienes realizaron el levantamiento y embalaje de cada uno de los indicios los cuales fueron trasladados a los laboratorios de balística para determinar si han sido utilizados para cometer otros ilícitos.
Por su parte, las autoridades penitenciarias indicaron que en coordinación con los miembros de Fusina continuarán con los operativos de requisa con el propósito de extraer del establecimiento todo tipo de objetos que puedan ser utilizados como arma, representando un peligro para la población que conviven en el centro penitenciario.
El lunes 20 de julio, en la Penitenciaría Nacional de Támara se reportó a las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario sobre un atentado criminal en contra de los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Militar asignados a la seguridad en los torreones, uno ubicado en el módulo de procesados y dos del módulo de máxima seguridad, dejando como saldo un sargento herido quien fue atendido por el personal médico y luego trasladado al Hospital Militar.
De inmediato se realizaron las coordinaciones con las autoridades de Fusina para realizar una intervención con la finalidad de restablecer el orden y control en el establecimiento, asimismo, los técnicos de Inspecciones Oculares recabaron al menos 200 casquillos de armas de fuego de diferentes calibres y la espoleta de tres granadas de fragmentación.
En la inspección física, se constató que los privados de libertad dispararon en contra de los torreones dañando los faroles, ventanales y estructura metálica. En uno de los torreones se contabilizaron al menos 40 perforaciones de bala. Los hechos continúan en proceso de investigación por parte de las autoridades competentes.
En la intervención y requisa del establecimiento penitenciario se contó con la veeduría de representantes de organismos de derechos humanos, a solicitud de las autoridades del INP.
