Tegucigalpa – En una reciente declaración, Enrique Ortez Sequeira, quien anteriormente fungió como magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE), ha emitido un fuerte comentario sobre la integridad de los procesos electorales en Honduras.
Según Ortez Sequeira, la ciudadanía ha perdido fe en estos procesos debido a la percepción de intereses particulares por parte de los magistrados del Consejo Nacional Electoral (CNE).
«Se cree que ellos defienden un interés particular y no en el interés del proceso», manifestó Ortez Sequeira, criticando la gestión de los actuales encargados de los comicios.
Para contrarrestar esta falta de confianza, el exmagistrado subrayó la importancia de implementar la biometría en las próximas elecciones primarias de 2025, como una medida para garantizar transparencia y equidad.
La preocupación de Ortez Sequeira no se limita solo a la administración electoral. Expresó su inquietud por la audiencia de presentación de medios de prueba en Nueva York, Estados Unidos, contra el exdiputado Midence Oquelí Martínez.
«Parece que en esos testimonios se menciona al actual presidente del Consejo Central Ejecutivo del Partido Liberal (CCEPL), el exconvicto, Yani Rosenthal», comentó, sugiriendo que las revelaciones podrían tener un impacto devastador dentro del Partido Liberal.
Ortez Sequeira no duda en afirmar que la narcopolítica sigue profundamente arraigada en los movimientos políticos de Honduras. «La narcopolítica sigue incrustada en los partidos políticos (…) lo que salga en esa corte seguramente va a revolver los cimientos del Partido Liberal y van a rodar muchas cabezas», añadió, anticipando un posible descalabro y reestructuración dentro del partido.
Este análisis no solo pone en evidencia la situación política actual en Honduras sino que también abre el debate sobre la necesidad de reformas profundas en el sistema electoral y la lucha contra la influencia de la narcopolítica en la política nacional.