Tegucigalpa – En un análisis reciente sobre la tensión diplomática entre Honduras y Estados Unidos, Graco Pérez, experto en geopolítica, especula que el gobierno de Xiomara Castro podría declarar a la embajadora estadounidense, Laura Dogu, persona non grata en un futuro cercano.
Este pronóstico surge tras acusaciones formuladas contra la Embajada de EE.UU. de intentar desestabilizar la democracia hondureña.
Pérez sugiere que como resultado de estas acusaciones, Estados Unidos podría verse obligado a retirar a su embajadora de Honduras para consultas.
El analista mencionó que, según un documento emitido tras una sesión del Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, se acusó a la embajada estadounidense de conspirar para desestabilizar el país.
Este tipo de acciones, argumenta Pérez, es más característico de naciones como Venezuela, y de potencias como China y Rusia que buscan influir en los asuntos internos de otros países.
La especulación de Pérez llega después de que el gobierno de Castro notificara oficialmente a la embajada estadounidense su decisión de finalizar el tratado de extradición entre ambos países.
Esta decisión se tomó horas después de que la embajadora Dogu expresara su preocupación por las interacciones de funcionarios hondureños con Vladimir Padrino López, el ministro de Defensa de Venezuela sancionado internacionalmente.
El experto también señala que el gobierno hondureño parece anticipar que Estados Unidos podría intervenir para evitar manipulaciones en los procesos electorales del país, lo que podría estar exacerbando las tensiones.
Este análisis pone de relieve la complejidad de las relaciones internacionales y las múltiples dimensiones que pueden influir en la diplomacia y la política exterior.
