Tegucigalpa. – Momentos de terror y angustia vivió la exprimera dama, Rosa Elena Bonilla de Lobo, luego de la reyerta que dejó seis mujeres muertas en la cárcel femenina de Támara, reveló el expresidente, Porfirio Lobo.
En ese sentido, Pepe Lobo manifestó que su “Rosa” está bien, pese vivió momentos de suma zozobra, en los cuales hubo disparos, puñaladas e incendio.
El exmandatario (2010-2014), explicó que el centro reclusorio de Támara es pequeño, por lo que los módulos que separan a varios grupos de mujeres quedan cerca unos de otros.
Añadió que antes de iniciar el actual gobierno solo había 350 reclusas y ahora hay 900.
Lobo lamentó que, desde que inició la pandemia del Covid-19 hace dos meses, no ha visto a su esposa.
Reiteró que la reclusión de su mujer es arbitraria, pues la Sala de lo Penal anuló el juicio. No obstante, dijo que todo este escenario se hizo “para salvar a la familia presidencial”.
Cabe recordar que, la exprimera dama permanece recluida desde hace poco más de dos años, luego de su captura en febrero de 2018.