Tegucigalpa – Las autoridades hondureñas han detenido a dos personas más en relación con el asesinato del reconocido ambientalista Juan Antonio López, ocurrido el 14 de septiembre en Tocoa, departamento de Colón. Las capturas, realizadas por la Policía Nacional en operativos recientes, elevan a cuatro el número de sospechosos arrestados en este caso que ha conmocionado al país.
El ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez, informó que los detenidos son Daniel Antonio Juárez Torres, de 31 años, y Kelton Samir Martínez Velásquez, de 21, ambos aprehendidos en Tocoa. Según las autoridades, uno de ellos ha sido vinculado directamente al crimen a través de pruebas científicas, como detalló el jefe policial Juan Manuel Aguilar Godoy en una conferencia de prensa.
Sánchez señaló que los detenidos podrían formar parte de una estructura criminal dedicada al sicariato en la región y que habrían sido contratados para perpetrar el asesinato de López. «No descansaremos hasta que todos los responsables sean llevados ante la justicia», afirmó el ministro, reiterando el compromiso del gobierno en esclarecer el caso.
Estas detenciones se producen un día después de la captura de otros dos sospechosos: Óscar Alexi Guardado Alvarenga, detenido en Tocoa, y Lenin Adony Cruz Munguía, arrestado en Sabá. Con estas acciones, las autoridades buscan desmantelar la red implicada en el homicidio del activista y regidor municipal.
La familia de Juan López y el Comité Municipal en Defensa de los Bienes Comunes y Públicos de Tocoa han expresado su expectativa de que estas detenciones conduzcan a una justicia plena. El abogado Eddy Tábora, representante legal de la familia y del comité, destacó la importancia de que se identifique no solo a los autores materiales, sino también a los intelectuales detrás del crimen.
«Esperamos que estas detenciones incluyan a quienes cometieron el hecho, ya sea como autores materiales, cómplices o encubridores, y que se les vincule con la responsabilidad penal correspondiente», declaró Tábora. Asimismo, subrayó la necesidad de una investigación exhaustiva que permita esclarecer todos los aspectos del caso.
Tábora también manifestó interés en conocer las acciones que el Ministerio Público emprenderá tras las detenciones, cuestionando si se presentarán acusaciones formales contra los sospechosos. «La captura de los presuntos autores materiales es un paso importante, pero no satisface completamente la demanda de justicia de la familia y las organizaciones involucradas», añadió.
Juan López fue asesinado a balazos cuando salía de una iglesia en la colonia Favio Ochoa de Tocoa. Su muerte ha generado indignación y ha puesto en relieve los riesgos que enfrentan los defensores del medio ambiente y líderes comunitarios en Honduras.
Las organizaciones defensoras de derechos humanos y medioambientales han instado a las autoridades a profundizar en las investigaciones y a garantizar que todos los responsables, tanto materiales como intelectuales, sean llevados ante la justicia.
El caso de Juan López se suma a una preocupante serie de ataques contra activistas en el país, lo que ha generado llamados nacionales e internacionales para fortalecer la protección de quienes defienden los bienes comunes y públicos.
El país permanece atento al desarrollo de las investigaciones, con la esperanza de que se logre justicia para Juan López y su familia, y que se sienten precedentes para la protección de los defensores del medio ambiente y los derechos humanos en Honduras.
