Tegucigalpa – En una emotiva conferencia de prensa frente a su residencia, la exprimera dama de Honduras, Ana García, junto a sus hijas Ana Daniela e Isabel Hernández y su suegra Elvira Alvarado, reaccionó a la reciente sentencia de 45 años impuesta a su esposo, el expresidente Juan Orlando Hernández, en una corte de Nueva York.
García criticó la sentencia como excesiva comparada con las impuestas a otros reconocidos narcotraficantes y afirmó que su esposo fue víctima de un «linchamiento judicial» motivado por intereses políticos.
«Mi esposo enfrentó a los criminales con más fuerza que cualquier otro y, sin embargo, enfrenta una pena más severa que los peores asesinos de Honduras,» declaró Ana García.
Según ella, la sentencia no solo castiga a Hernández sino que también desalienta a cualquier líder internacional de cooperar con Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico.
Ana García prometió que la familia Hernández continuará luchando para probar la inocencia de Juan Orlando, mencionando que ya se están preparando para iniciar el proceso de apelación.
«Este es solo el comienzo de nuestra lucha. La verdad prevalecerá,» aseguró García, quien también expresó su deseo de que se respeten sus derechos humanos para visitar a su esposo durante el proceso legal.
La familia ha manifestado su profunda decepción y angustia por la forma en que se ha manejado el caso, criticando la falta de imparcialidad y la influencia de testimonios dudosos de criminales que buscan beneficios propios.
Isabel Hernández, una de las hijas, expresó su desilusión diciendo que «el mal ha triunfado sobre el bien» y lamentó que su padre sea castigado por sus esfuerzos contra el narcotráfico.
La familia hizo un llamado a la población hondureña y a la comunidad internacional para apoyar su lucha por la justicia y la integridad, enfatizando que continuarán trabajando hasta ver a Hernández de vuelta en Honduras, libre de las acusaciones que, según ellos, son infundadas.
