Tegucigalpa – Las Fuerzas Armadas de Honduras emitieron un contundente comunicado este jueves, calificando como «falsedad» las acusaciones hechas por Cossette López, presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), quien denunció presuntas irregularidades en torno a las recientes elecciones primarias que involucrarían a la institución militar, un expresidente y una candidata presidencial.
«Rechazamos el mensaje de la señora presidenta del CNE por su falsedad. El alto mando jamás intentará cambiar un informe o bitácora que refleja nuestro trabajo», afirmaron categóricamente las Fuerzas Armadas en su comunicado oficial.
La institución castrense detalló que, desde el pasado lunes, once oficiales militares han comparecido ante el Ministerio Público para rendir declaraciones y entregar diversos documentos, incluyendo informes escritos, bitácoras y registros telefónicos, como parte de las investigaciones sobre las irregularidades detectadas en el proceso electoral.
La controversia se originó cuando López publicó el miércoles en la red social X una denuncia en la que aseguraba que «fingiendo una subordinación que nunca ha existido y siguiendo con una coordinación que nunca ha dejado de existir, hoy (martes) el alto mando de las Fuerzas Armadas se reunió con un expresidente y una candidata y decidieron sustituir los informes que ya existían».
Aunque no mencionó nombres específicos, las alusiones de López parecen dirigirse al expresidente Manuel Zelaya, esposo y principal asesor de la presidenta Xiomara Castro, así como a Rixi Moncada, virtual candidata presidencial de Libre y actual ministra de Defensa.
Por su parte, Moncada respondió enérgicamente a estas acusaciones, calificándolas como una «gran vileza irresponsable, sobre todo si no tiene un respaldo ni pruebas». La ministra de Defensa aseguró que es «absolutamente falso» que haya participado en reuniones con el alto mando militar para manipular informes.
«La presidenta del ente electoral debe ser muy consciente del rol que le corresponde desempeñar constitucionalmente, debe ser responsable», expresó Moncada, quien además exigió al Ministerio Público agilizar las investigaciones sobre las irregularidades en la distribución de maletas electorales en Tegucigalpa y San Pedro Sula, que provocaron la extensión del proceso electoral.
Las elecciones primarias, originalmente programadas para concluir el 9 de marzo, debieron extenderse hasta el 16 de marzo para permitir el sufragio de más de 5,500 votantes en dos barrios de Tegucigalpa que no pudieron ejercer su derecho al voto en la fecha inicialmente establecida.
En su comunicado, las Fuerzas Armadas reafirmaron su compromiso constitucional de apoyar la realización de los procesos electorales «con profesionalismo, transparencia y estrictamente apegados a la Constitución y las leyes», desmarcándose así de cualquier intento de manipulación del proceso electoral.
Esta controversia se suma a las tensiones ya existentes en torno a los resultados de las elecciones primarias, que han generado denuncias de irregularidades por parte de diversos actores políticos en el país centroamericano.
