Las milicias palestinas matan al menos a 100 personas al infiltrar decenas de milicianos, secuestrar civiles y soldados, y disparar 2.500 cohetes, en una estudiada operación sorpresa que Hamás justifica en “los crímenes de la ocupación”. “Estamos en guerra”, declara Netanyahu.
Por El País
Israel y las milicias de Gaza han entrado en pocas horas en una guerra abierta después de que los grupos armados de la Franja lanzasen a primera hora de este sábado un ataque sorpresa sin precedentes, con la infiltración de decenas de hombres armados, secuestros de civiles y soldados y una intensa descarga de cohetes (2.500, según un portavoz militar israelí, hasta 5.000, según Hamás) que ha causado ya al menos 100 muertos y cientos de heridos. Se trata de una operación inédita, no solo por su alcance y simbolismo, sino también por su carácter combinado y por el número de hombres armados que ha logrado penetrar en territorio israelí.
Circulan, además, imágenes de decenas de secuestros, que Hamás reivindica e Israel ha confirmado a media tarde. Pasado el shock inicial, el Ejército israelí ha bombardeado masivamente la Franja, causando en pocas horas 198 muertos, según el Ministerio de Sanidad de Gaza. “Ciudadanos de Israel, estamos en guerra. Y la ganaremos”, ha asegurado el primer ministro, Benjamín Netanyahu. Las Fuerzas Armadas han declarado el estado de preparación para la guerra y movilizado a miles de reservistas.
En la madrugada de este sábado, con el país a medio gas por coincidir la jornada del sabbat y el final de la festividad judía de Sucot, decenas de milicianos palestinos han logrado cruzar la ultraprotegida frontera por aire, mar y tierra, según un portavoz militar israelí. Luego han mantenido tiroteos con soldados israelíes en localidades cercanas a la Franja. Vídeos difundidos en redes sociales muestran además el aparente secuestro de israelíes, algunos posiblemente sin vida. También cómo varias mujeres y un hombre son supuestamente trasladados a Gaza por los milicianos desde el kibutz de Kfar Aza, cerca de la Franja. El de los secuestros es un tema particularmente sensible en el país (donde el servicio militar es obligatorio). En el pasado ha desencadenado operaciones a gran escala y motivado canjes por presos palestinos.