Tegucigalpa – El primer contingente de hondureños deportados desde Estados Unidos en aviones militares llegó este viernes a territorio nacional, en lo que representa un cambio significativo en los procedimientos de repatriación. Los vuelos, que aterrizaron a mediodía y a las 3:00 de la tarde respectivamente, transportaron a más de un centenar de connacionales que fueron detenidos durante las recientes operaciones migratorias de la administración estadounidense.
El canciller Eduardo Enrique Reina confirmó que estas deportaciones son resultado de negociaciones previas entre ambos gobiernos, aunque no detalló los términos específicos del acuerdo. «Como Gobierno hemos podido negociar con los Estados Unidos, y es por eso que hoy estamos aceptando los vuelos militares con hondureños deportados», explicó el funcionario.
Un aspecto destacable de estas repatriaciones fue la presencia de varios ministros y secretarios de Estado en la recepción de los deportados, evidenciando la relevancia que el gobierno hondureño otorga a este proceso. Las autoridades verificaron que los migrantes fueron trasladados en condiciones dignas, sin el uso de grilletes ni esposas durante el vuelo.
La utilización de aeronaves militares para las deportaciones marca un precedente en la historia reciente de las relaciones migratorias entre Honduras y Estados Unidos, señalando posiblemente el inicio de una nueva etapa en las políticas de repatriación. Este cambio en la modalidad de los traslados coincide con el endurecimiento de las medidas migratorias anunciadas por las autoridades estadounidenses.
Las autoridades hondureñas continúan monitoreando de cerca estos procesos de deportación, asegurando que se respeten los derechos humanos de los connacionales durante su repatriación y preparándose para recibir futuros vuelos bajo esta nueva modalidad.