Tegucigalpa – Wilson Paz, director del INM, reveló que enero cerró con aproximadamente 6,000 hondureños retornados, principalmente desde Estados Unidos y en menor medida desde México. Los nuevos vuelos anunciados se suman a las deportaciones regulares que se realizan dos veces por semana según el convenio bilateral existente.
«Esperamos para esta semana seis vuelos que provienen de los Estados Unidos y algunas conducciones terrestres de México», precisó Paz, aclarando que estos no serán realizados en aeronaves militares, lo que sugiere la posibilidad de deportaciones adicionales por esa vía en el futuro.
El funcionario destacó que la estrategia nacional de emergencia impulsada por la presidenta Xiomara Castro no solo involucra esfuerzos gubernamentales, sino que busca integrar al sector privado en la atención a los retornados.
«Lo que ustedes tienen que saber que esta estrategia nacional de emergencia no solamente la abordamos desde el Gobierno, sino que también estos sectores también puedan aportar», enfatizó.
Las autoridades migratorias mantienen sus operaciones preparadas para recibir a los connacionales deportados, en el marco del plan gubernamental que contempla apoyo económico y programas de reinserción para los retornados. La situación podría intensificarse en cualquier momento, ya que Estados Unidos tiene la capacidad de realizar deportaciones adicionales mediante vuelos militares, independientemente de los vuelos comerciales programados.