Tegucigalpa. – La Conferencia Episcopal de Honduras (CEH), anunció que se ha preparado un protocolo de bioseguridad para la preparación y la celebración de la eucaristía y de los demás sacramentos, así como en las reuniones y actividades de las parroquias, mientras se está en camino hacia el restablecimiento normal de las celebraciones litúrgicas.
En el referido plan, la CEH, sostiene que el protocolo, es en “fidelidad a la misión que Jesucristo ha encomendado a la Iglesia: anunciar el evangelio, administrar los Sacramentos, especialmente la eucaristía, y formar a la comunidad cristiana, queremos atender la salud espiritual de los fieles que el Señor ha confiado a nuestro cuidado pastoral”.
Asimismo, menciona que, en este tiempo de emergencia sanitaria, “hemos redescubierto la dimensión familiar y comunitaria de nuestra fe cristiana, participando a través de las redes sociales en los diversos momentos celebrativos (eucaristía, santo rosario, viacrucis, jornadas de oración, etc.).
“Durante la cuarentena, hemos vivido intensamente en nuestros hogares la experiencia del encuentro, de la escucha y la comprensión. Y las circunstancias difíciles también nos han llevado a compartir, en la caridad y la solidaridad cristiana, lo que Dios nos ha dado, auxiliando a nuestros hermanos más necesitados”, cita el documento.
“Conscientes de la gravedad de la pandemia, hemos acatado y apoyado responsablemente las medidas establecidas por las autoridades competentes, a fin de evitar la propagación del Covid-19. Evidentemente, como lo hemos visto, estas medidas no niegan ni impiden la libertad de expresar nuestras convicciones religiosas y la vivencia de la fe cristiana”, sostiene seguidamente la CEH en su texto.
El protocolo para el culto religioso en tiempos de pandemia está establecido en cuatro diferentes etapas:
Etapa 1
Está etapa menciona las salidas que están programadas para la población según el número de identidad y señalan que “teniendo en cuenta las condiciones sanitarias, se añade una nueva causa de salida: la visita breve al templo para la oración individual, la asistencia espiritual a los fieles y la celebración de la santa misa”.
Asimismo, cada obispo en su diócesis determinará las condiciones como cuales son los templos que se abrirán y los horarios. Estas condiciones se aplican de lunes a viernes, según lo establecido por el gobierno, como días hábiles para salir según el último dígito de la identidad, pasaporte o carnet de residencia. Se establecerán pilotajes, siguiendo las medidas de bioseguridad, como el distanciamiento social.
La CEH recomienda que los niños, las personas con capacidades diferentes, mayores de 70 años y con enfermedades de base graves, se abstengan de participar. De igual manera, a los sacerdotes mayores de 70 años, se les pide por los momentos celebrar en privado.
Etapa 2
La segunda etapa, iniciará cuando se finalice la cuarentena y se permitirá a los fieles participar de las celebraciones eucarísticas dominicales y diarias, pero no de manera masiva, según la CEH.
Será en grupos pequeños, de acuerdo al espacio del templo, guardando el distanciamiento físico requerido.
Etapa 3
Un tercer momento será para restablecer las reuniones de formación catequética y de pastoral, siempre cuidando las normas de bioseguridad.
Etapa 4
En la última etapa, se espera retomar la vida pastoral ordinaria, teniendo en cuenta las medidas que fueren necesarias hasta que se encuentre la solución médica a la pandemia.