Tegucigalpa El pastor evangélico, Mario Tomás Barahona, dijo que nosotros no incendiamos, “sino que buscamos apagar el fuego”.
-Urge un gran pacto nacional, pero no político, sino humano, según Mario Tomás Barahona
El dirigente aludió a las marchas violentas por parte de la plataforma de Educación y Salud, que han desembocado en quema de autos, negocios y hasta parte de la Embajada de Estados Unidos.
En ese sentido, Barahona comentó que siempre “nos hemos sumado a la restauración, a la oración y a pedirle a Dios que toque el corazón del pueblo hondureño”.
Reconoció que crisis hay en todas las naciones y la manera de resolverlas es que los actores dialoguen, no hay otra forma.
Cambios
“Nosotros pedimos cambios, pero con la dirección de Dios”, dijo el religioso.
La Iglesia Evangélica hace un llamado a la paz de Honduras, pero la restauración tiene que venir desde el seno de la familia, según el conductor de la congregación Mi Viña.
“No sólo señalando y acusando cómo se van a resolver los problemas del país, sino presentando propuestas concretas, planteó.
Para Barahona, urge un gran acuerdo nacional, pero no político sino humano, buscando a Dios.
“No es con pistolas ni difamando como se enfrenta esta situación, sino a través de un cambio que nos lleve a la reconciliación y así podremos levantar a la nación”, sentenció.
“No es con pistolas ni difamando cómo se puede levantar el país”
Mario Tomás Barahona
Pastor evangélico