Tegucigalpa – El futuro político del presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, se encuentra en una situación delicada mientras el Partido Salvador de Honduras (PSH) se prepara para llevar a cabo una reunión crucial en la ciudad de Siguatepeque el próximo domingo.
En esta reunión, los líderes del PSH tienen previsto discutir y determinar si Redondo será expulsado o no de las filas de su partido, considerando su alineación progresiva con las posturas del Partido Libre, lo que ha generado tensiones y discrepancias significativas dentro del PSH.
El diputado Tomás Ramírez, vocero del partido, señaló que aunque históricamente se ha respetado la diversidad de opiniones dentro del PSH, el caso de Redondo ha llevado a una ruptura significativa, y su permanencia en el partido se encuentra actualmente bajo consideración.
Aclaró que, en última instancia, la expulsión de Redondo solo podría llevarse a cabo si este renuncia o si el comité disciplinario lo expulsa oficialmente, dejando en claro que ninguna de estas decisiones se ha tomado hasta el momento.
En los últimos meses, diputados del PSH han denunciado una serie de conflictos internos, incluyendo acusaciones de persecución, discriminación y espionaje supuestamente perpetrados por Redondo.
Salvador Nasralla, presidente del PSH, no ha ocultado su descontento, catalogando a Redondo como un “mentiroso” y lo ha acusado de ejercer “abuso de autoridad”.
Estas tensiones han llevado a una creciente división dentro del partido, con miembros cada vez más críticos del liderazgo de Redondo, especialmente en relación con la controvertida elección del Fiscal General interino.
La diputada Maribel Espinoza, una vez defensora de Redondo, ha expresado su arrepentimiento y ha ofrecido disculpas públicas por su apoyo anterior al presidente del Congreso Nacional.
Alega haber esperado un liderazgo más democrático y propenso al diálogo por parte de Redondo, y su decepción ha resonado con otros miembros del partido que comparten sus inquietudes y frustraciones.
Mientras tanto, los observadores políticos están a la expectativa del resultado de la reunión del domingo y cómo esto podría afectar el paisaje político y legislativo en Honduras en los próximos meses.
