Tegucigalpa – En la noche del martes y la madrugada del miércoles, se desató una intensa balacera que duró aproximadamente 30 minutos en el sector. Este enfrentamiento armado se produjo entre agentes de seguridad y presuntos criminales, generando un escenario de gran tensión.
Una de las teorías que se maneja sugiere que el tiroteo se desencadenó cuando funcionarios de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y la Policía Nacional (PN) llevaban a cabo un operativo para dar con un cabecilla de la Mara Salvatrucha (MS-13). Se cree que los miembros de la pandilla opusieron resistencia y se enfrentaron a las fuerzas de seguridad.
Según informes de medios de comunicación, durante el intercambio de disparos no se registraron heridos ni se realizaron capturas.
Sin embargo, algunas patrullas policiales y autobuses que se encontraban en las cercanías resultaron dañados por los disparos, con neumáticos perforados y ventanas rotas.
Como consecuencia de la balacera, el servicio de transporte en la zona operaba con limitaciones, ya que los conductores estaban preocupados por la situación de inseguridad, según reportó un medio local.
Tras el incidente, los agentes de seguridad llevaron a cabo operativos de saturación con el objetivo de localizar a los responsables de la balacera, quienes lograron huir durante el enfrentamiento.
Otra teoría planteada sobre este suceso sugiere que la balacera en El Ocotillo, San Pedro Sula, Cortés, estuvo relacionada con una protesta de los habitantes de la zona que coincidió con el operativo policial en busca de los delincuentes.
Las autoridades continúan investigando este incidente para esclarecer los hechos y determinar la verdadera causa de la balacera. La comunidad local está preocupada por la violencia desatada y espera que se tomen medidas para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los residentes.