El presunto cofundador del cártel de Sinaloa, Ismael “El Mayo” Zambada, compareció el jueves ante un tribunal federal en Texas para su más reciente audiencia desde su arresto hace una semana, en un caso lleno de intrigas enfocado en una de las organizaciones de narcotráfico más poderosas y letales del mundo.
Por CNN
En la audiencia judicial de siete minutos, tanto los fiscales como los abogados defensores solicitaron un plazo de 30 días en los procedimientos para tener tiempo de reunir pruebas adicionales, lo cual fue concedido.
Zambada, de 76 años, se encuentra detenido sin derecho a fianza después de declararse inocente el 26 de julio de siete cargos penales federales, incluidos los de empresa delictiva continua y lavado de dinero. Fue arrestado el día anterior en El Paso junto con Joaquín Guzmán López, el hijo de 38 años del infame jefe y fundador del cártel Joaquín “El Chapo” Guzmán.
El jueves, Zambada fue llevado a la sala del tribunal sentado en una silla de ruedas y vestía una sudadera azul con capucha y medias naranjas. La escena fuera del juzgado en El Paso mostró una fuerte presencia de seguridad, con agentes federales y perros detectores de bombas patrullando el perímetro.
Ahora, varios fiscales de EE.UU. compiten para ver quién juzgará primero a Zambada, quien se encuentra detenido por los alguaciles de EE.UU. en un lugar no revelado debido a las preocupaciones de seguridad y las posibles amenazas a su vida.
Al menos cinco fiscales de EE.UU. (en Nueva York, California, Texas, Illinois y Washington) han presentado acusaciones contra él, y varios quieren ser los primeros en lidiar con el capo de la droga, dijeron a CNN fuentes familiarizadas con el asunto.
La decisión en última instancia recae en el Departamento de Justicia de Estados Unidos. Ninguna de las oficinas de los fiscales de EE.UU. con acusaciones contra Zambada hizo comentarios el jueves sobre los casos.
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