El Secretario General de la ONU, António Guterres, hizo un llamado urgente a la comunidad internacional para alcanzar una paz justa y sostenible en Ucrania durante su discurso inaugural en la Conferencia de Seguridad de Múnich.
“No hay lugar en la Europa del siglo XXI” para la guerra desatada por la invasión rusa, la cual ha causado un “coste atroz en vidas humanas y sufrimiento”, denunció Guterres.
El diplomático portugués exigió una paz “en línea con la Carta de la ONU y el derecho internacional” que respete la “integridad territorial de los Estados soberanos”.
Guterres también alertó sobre la creciente fragmentación del mundo, que ha resucitado la amenaza nuclear y dificultado la gestión de crisis como la climática y la de la inteligencia artificial.
“El orden global actual no funciona para nadie”, sentenció Guterres, criticando a los países que “hacen lo que quieren, sin rendir cuentas”.
“Millones de civiles están pagando un precio terrible” por las guerras y crisis actuales, enfatizó Guterres, quien también mencionó el riesgo de una ofensiva terrestre israelí en Gaza.
Para enfrentar estos desafíos, Guterres propuso fortalecer la arquitectura global de paz y seguridad, reformando los sistemas de seguridad colectiva para un “multilateralismo más interconectado e inclusivo”.
La Nueva Agenda para la Paz, que se discutirá en la Cumbre del Futuro en septiembre, busca actualizar las herramientas internacionales para afrontar las nuevas amenazas del siglo XXI.
El mensaje de Guterres en Múnich es claro: la paz y la seguridad global solo se podrán alcanzar mediante la cooperación internacional y el respeto al derecho internacional.