Tegucigalpa – Jorge Cálix, precandidato del Partido Libertad y Refundación (Libre), ha hecho una llamada de atención sobre el flujo de miles de millones de dólares provenientes de China hacia América Latina, cuestionando por qué Honduras no ha recibido ni un solo dólar de esta inversión.
En medio de un ambiente político marcado por la urgencia de generar desarrollo económico, Cálix ha señalado la necesidad de crear las condiciones propicias para atraer inversiones extranjeras, un aspecto que considera que el actual gobierno liderado por la presidenta Xiomara Castro ha descuidado.
En su discurso, Cálix ha enfatizado la importancia de realizar un trabajo previo y establecer las condiciones adecuadas para atraer inversiones, incluso mencionando su disposición a realizar gestiones directas con potenciales inversionistas en cualquier parte del mundo, ya sea en Estados Unidos, China o Irlanda.
Su compromiso es claro: hacer lo necesario para que Honduras sea un destino atractivo para la inversión extranjera.
Al ser cuestionado sobre el apoyo de la familia presidencial a la precandidata Rixi Moncada, Cálix ha reiterado su convicción de que las elecciones se ganan con votos y no con el apoyo del oficialismo.
Su enfoque se centra en conectarse con la población, especialmente con los jóvenes, a quienes considera fundamentales en el panorama político actual.
Con un conocimiento profundo de los problemas que afectan a la población en los barrios y colonias de la capital, Cálix ha destacado su trabajo en las bases como una de las principales fortalezas de su precandidatura.
Su objetivo es claro: cambiar el rumbo del país y responder a las expectativas de la ciudadanía que, según él, no se han visto satisfechas en los últimos años.
En última instancia, para Cálix, el verdadero propósito de su precandidatura es garantizar que todos los hondureños tengan acceso a las necesidades básicas, como la alimentación, y esto solo será posible mediante la atracción de inversión extranjera que genere empleo y desarrollo económico en el país.
