Tegucigalpa. – Lleno de fe y esperanza fue trasladado hacia Boston, Massachusetts, Estados Unidos, la mañana de este jueves, el joven Wilson José Berrios, quien será sometido a una reconstrucción facial en un hospital de esa ciudad.
Desde muy temprano, a eso de las 5:00 de la mañana, el joven fue llevado desde el Hospital para el Niño Quemado, a bordo de una ambulancia de la Cruz Verde, hacia el aeropuerto Toncontín donde un grupo de familiares y amigos estaban para despedirlo y desearle una pronta recuperación.
Los familiares y amigos portaban una camiseta con la fotografía de Wilson y una leyenda que dice: “Volveremos a sonreír juntos”.
El joven afectado por un explosivo de pólvora, conocido como cebolla en diciembre pasado en Choluteca cuando se inauguraba en esa ciudad la Villa Navideña, viajó esta madrugada junto a su padre y un grupo de especialistas rumbo a Boston, Massachusetts, Estados Unidos, a bordo de una aeronave de la Fuerza Aérea Hondureña.
Wilson Berríos de 18 años, fue aceptado por el Shriners Hospitals, donde su recuperación estará a manos de Robert L. Sheridan, un médico cirujano muy reconocido en los Estados Unidos por su implacable trabajo.
Cabe señalar que el galeno, quien cuenta con una amplia experiencia en el tratamiento que será sometido Wilson, es catedrático de Harvard University medical School.
Berríos fue trasladado en horas de la mañana desde la Fundación de Atención a Niños Quemados (Fundaniquem), a la Base Aérea Coronel Hernán Acosta Mejía, desde donde alzo vuelo de hangar presidencial.
La periodista Karen Sauceda, madre de Wilson, manifestó que hoy les embarga la alegría y la emoción y agradecen a Dios porque ha sido maravilloso con el joven así como con el pueblo hondureño que se ha solidarizado con este caso.
Detalló que el joven es acompañado en el viaje por el director de Fundaniquem, doctor Omar Mejía; Grace Zablah, relacionadora pública de la fundación; la doctora Rivas y Wilson Berríos padre del paciente.
Sauceda indicó que según la información que le han dado a su esposa de parte del hospital de Boston, Wilson tardará entre cuatro y seis meses para su recuperación, aunque al llegar los especialistas le harán un estudio más profundo.