El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, habla hoy durante una rueda de prensa en el Palacio Nacional, en Ciudad de México (México). EFE/ José Méndez
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, negó este lunes que la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA, en inglés) haya tenido “injerencia directa” en la captura el viernes del capo mexicano Rafael Caro Quintero, y afirmó que aún no sabe cuánto tardará su extradición a Estados Unidos.
“En el caso de la participación de la DEA, como lo señaló el embajador de Estados Unidos (en México, Ken Salazar), no tuvieron injerencia directa”, afirmó el mandatario durante su rueda de prensa matutina desde el Palacio Nacional.
López Obrador aclaró que la agencia antidrogas no proporcionó tampoco información sobre la ubicación del capo mexicano, el más buscado por la DEA de Estados Unidos por ser presunto responsable del asesinato de su agente Enrique “Kiki” Camarena en 1985.
“Se pide información en algunos casos, en este no”, apuntó, aunque dijo que a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) habían solicitado cooperación a la agencia estadounidense, pero no se llevó a cabo.
Ante la pregunta expresa sobre si la DEA había ubicado a Caro Quintero, el presidente fue enfático: “No, no, no y mucho menos (participaron) elementos (de la DEA), ya no es como antes”.
El mandatario mexicano se refirió así a la información que dio el sábado la directora de la agencia, Anne Milgram, en una carta dirigida a sus empleados en donde aseguró que “el increíble equipo de la DEA en México” había trabajado en colaboración con las autoridades mexicanas para arrestar a Caro Quintero.
“Son informaciones no veraces, pero afortunadamente el embajador aclaró. Creo que la directora de la DEA hizo una declaración y eso fue lo que originó la versión de que habían participado y la información que me transmitió el almirante (de la Marina) fue en el sentido de que no hubo esa participación”, insistió López Obrador.
SIN FECHA DE EXTRADICIÓN
Sobre la extradición del capo mexicano a Estados Unidos, donde es requerido por autoridades, López Obrador aseguró que aún no se tiene contemplada una fecha.
“No sabemos (cuánto tome el proceso de extradición), desde el sábado se presentaron amparos (a favor de Caro Quintero) que se están tramitando y las autoridades están respondiendo a jueces, tanto la Fiscalía como la Secretaría de Marina”, aclaró.
Señaló que defensores están pidiendo la protección de Caro Quintero, mediante recursos de amparo.
“Entonces se está viendo el proceso, se va a actuar, desde luego, como siempre, de manera legal, lo que se decida en el procedimiento, pero vamos a cuidar de que no haya corrupción y cualquier acto contrario a la ley”, manifestó.
Asimismo, aclaró que pese a que la detención del narcotraficante mexicano se dio apenas unos días después de su reunión con el presidente estadounidense, Joe Biden, en Washington, no tuvo nada que ver en el arresto.
“No, con el presidente Biden traté otros asuntos y fue muy buena la relación”.
Denunció que los comentarios de que haya tratado el tema con el mandatario estadounidense provienen de sus adversarios.
“Un presidente de México no puede ir a tratar con un presidente de otro país el asunto de un presunto delincuente, eso a lo mejor lo hacían antes”, apuntó.
Fundador del Cartel de Guadalajara, Caro Quintero fue uno de los principales capos en la década de 1980 y de los primeros en enviar droga a gran escala a Estados Unidos.
Nacido el 3 de octubre de 1952 en el estado mexicano de Sinaloa, cuna de los grandes capos mexicanos, Caro Quintero amasó una gran fortuna y fundó su cartel junto con Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo, alias “Don Neto”.
La DEA ofrecía 20 millones de dólares por su captura, la cifra más elevada ofrecida por el arresto de un fugitivo por parte de la agencia antidrogas. EFE