Tegucigalpa – Este miércoles, Luis Zelaya, exprecandidato presidencial, presentó una querella legal contra Mario Segura, jefe de la bancada liberal, ante la Corte Suprema de Justicia de Honduras, acusándolo de calumnia y difamación.
Zelaya, visiblemente molesto, se presentó en la secretaría de la presidencia del máximo tribunal del país para formalizar su denuncia, armado de pruebas que, según él, refutan las afirmaciones de Segura.
Segura había declarado en un video que Zelaya recibía cheques de la Casa Presidencial, una acusación que Zelaya desmiente fervientemente. “Le di un tiempo prudencial para que mostrara esos cheques que supuestamente tiene, y como no lo hizo, ahora tendrá que probarlo en los tribunales”, declaró Zelaya a los periodistas presentes.
Esta querella surge en un contexto de tensiones internas dentro del Partido Liberal, exacerbadas por declaraciones similares de la diputada Kathia Crivelli, quien acusó a Zelaya de malversación de fondos del partido. Aunque Zelaya rechaza estas acusaciones, advirtió que podría tomar medidas legales si Crivelli persiste en sus alegaciones.
Zelaya también hizo un llamado a los miembros del Partido Liberal y a los medios de comunicación para que diferencien entre opiniones personales y actos de difamación y calumnia.
“No entablaría una querella si no estuviera seguro de mi posición. No recibo cheques de Casa Presidencial, así que basta de mentiras”, afirmó enérgicamente.
El exprecandidato no descartó la posibilidad de llegar a una conciliación con Segura, siempre y cuando este último ofrezca disculpas públicas por las declaraciones hechas. La situación pone de relieve las divisiones dentro del Partido Liberal y plantea interrogantes sobre la cohesión de cara a futuros retos electorales.