Tegucigalpa – El expresidente de Honduras, Manuel Zelaya Rosales (2006-2009), rechazó categóricamente este miércoles cualquier acusación que lo relacione con delitos o dinero proveniente del narcotráfico.
A través de sus redes sociales, Zelaya afirmó que en sus 72 años de vida jamás ha cometido crímenes ni ha tenido vínculos con actividades ilícitas.
«Quien afirme lo contrario lo hace con un mezquino interés y está mintiendo», señaló el exmandatario, que además destacó su lucha junto a su esposa, la presidenta Xiomara Castro, durante más de cuatro décadas.
El asesor presidencial se pronunció en medio de crecientes críticas, las cuales se intensificaron luego de la filtración de un video en el que su hermano aparece reunido con narcotraficantes confesos en Estados Unidos.
En el video, se menciona un supuesto aporte a la campaña política de Zelaya, donde se sugiere que una parte debería ir para el «comandante», término que ha generado especulaciones sobre su identidad.
Zelaya desestimó los ataques, señalando que sus detractores pueden continuar utilizando las redes sociales y los medios de comunicación para intentar desacreditarlo, pero aseguró que su compromiso con el socialismo y su oposición a las políticas de Estados Unidos en Honduras no se verán afectados.
«No cambiaré mi compromiso con el socialismo frente a las políticas equivocadas e imperiales de Estados Unidos», sentenció.
Asimismo, el expresidente dejó claro que no responderá por las acciones de otros, incluso si se trata de un familiar, subrayando que no tiene responsabilidad por «la conducta abominable de otra persona».
Estas declaraciones surgen en un contexto de creciente polarización en Honduras, donde las acusaciones relacionadas con el narcotráfico han puesto a varias figuras políticas bajo el escrutinio público.