Tegucigalpa – La crisis en el sistema de salud hondureño amenaza con agravarse después de que la Asociación Hondureña de Médicos Residentes (ASOHMER) enviara un comunicado formal a la Secretaría de Salud (SESAL) exigiendo el pago inmediato de salarios adeudados y advirtiendo sobre posibles medidas de presión.
Allan Martínez, representante de ASOHMER, confirmó que el gremio ha expresado su preocupación ante las autoridades sanitarias por el incumplimiento en el pago del salario beca correspondiente a la labor asistencial y académica. Además, denunció la exclusión arbitraria de 17 residentes de la planilla de pagos, situación que ha generado un profundo descontento entre los profesionales.
«Los médicos residentes no han recibido el pago correspondiente a dos meses de trabajo, lo que ha generado una crisis económica insostenible para ellos y sus familias», señala el comunicado emitido por la asociación.
El documento destaca la importancia crucial de la labor de estos profesionales para el funcionamiento de los hospitales a nivel nacional, quienes «cubren horarios extenuantes, guardias nocturnas y realizan atenciones que, en otros contextos, requerirían el trabajo de varios especialistas».
Respecto a los 17 médicos excluidos de la nómina, la asociación explica que se trata de profesionales que repitieron un año académico bajo la promesa de continuar recibiendo su salario beca, pero han sido injustamente eliminados de la planilla con base en una normativa que, según argumentan, no debería aplicarse retroactivamente.
Ante la falta de respuesta por parte de las autoridades sanitarias, ASOHMER ha anunciado un paro general de actividades a partir del lunes 10 de marzo de 2025, que se mantendrá hasta que se cumplan tres exigencias fundamentales:
- El pago inmediato y completo de los dos meses adeudados a todos los médicos residentes.
- La inclusión en la nómina de pago de los 17 colegas afectados, en cumplimiento de acuerdos previamente establecidos.
- Una solicitud formal para la revisión y posible reajuste del salario beca, en respuesta al aumento del costo de vida y la inflación.
Los agremiados también denuncian la eliminación progresiva de beneficios hospitalarios que anteriormente se otorgaban a los residentes, como parqueo y alimentación, y reclaman un ajuste salarial acorde con la mejora del salario médico gremial obtenida este año.
Esta situación podría tener un impacto significativo en la atención hospitalaria en todo el país si no se encuentra una solución antes del plazo establecido por los médicos residentes, quienes constituyen un pilar fundamental en la prestación de servicios de salud en Honduras.
