Tegucigalpa. – El secretario general de la Central General de Trabajadores (CGT), Daniel Durón, anunció este sábado el retiro de la parte obrera en la mesa de negociación para el nuevo salario mínimo.
Durón también solicitó al Gobierno determinar el próximo ajuste salarial.
“Más que una amenaza es una decisión, tenemos más de seis meses de estar en ese proceso, las propuestas están bastante distanciadas”, declaró Durón a un canal de televisión.
El dirigente adelantó que será difícil que los trabajadores y empresarios lleguen a un acuerdo antes de que finalice abril.
Durón explicó que ambas partes tienen posturas distintas que obstaculizan un acuerdo.
En ese sentido, el representante de los obreros dijo que rechazan un ajuste salarial que sea menor al índice de inflación y que deje por fuero a los trabajadores que laboraron durante la pandemia.
“Hay un segmento fuerte de trabajadores que laboraron, que trabajaron, se arriesgaron y fueron contaminados que no pueden ser excluidos del ajuste salarial”, declaró.
Durón detalló que dentro de esos trabajadores están los que laboran en empresas consideradas esenciales durante la emergencia sanitaria, como farmacias y supermercados.
Comentó que ahora el ajuste salarial está en manos del Gobierno, porque ellos ya dejaron clara una posición, y no ven una posibilidad de arreglo con los empresarios.