San Pedro Sula – En un trágico suceso que ha sacudido a la comunidad de San Pedro Sula, la odontóloga Tesla Paola Alemán Cantillano se encuentra bajo custodia policial en el Hospital Mario Catarino Rivas, después de presuntamente causar la muerte de su hija de tres años, Ana Paula Reyes Alemán, durante lo que familiares describen como un «episodio de ansiedad».
Los hechos ocurrieron en la madrugada del domingo en la colonia Las Flores, específicamente entre las calles 17 y 18 de la 3ª avenida. Según informes preliminares, la menor sufrió una herida fatal en el cuello con un arma blanca. Tras el incidente, la madre habría intentado atentar contra su propia vida, sin conseguirlo.
Fuentes cercanas al caso han revelado que la profesional de la salud podría estar atravesando por trastornos psicológicos significativos. Sin embargo, las autoridades esperan los resultados de una evaluación médica exhaustiva para confirmar estas afirmaciones y determinar su estado mental al momento del incidente.
El caso ha generado un intenso debate en redes sociales sobre la responsabilidad familiar y estatal en situaciones donde existen antecedentes de problemas de salud mental. Numerosos ciudadanos han cuestionado por qué la menor permanecía bajo el cuidado exclusivo de su madre si existían indicios previos de inestabilidad emocional.
La División de Medicina Forense ya ha iniciado las investigaciones correspondientes, mientras que las autoridades judiciales preparan el proceso legal que enfrentará Alemán Cantillano una vez sea dada de alta del centro hospitalario.
Este trágico suceso ha puesto de manifiesto la urgente necesidad de fortalecer los sistemas de prevención y atención en salud mental en Honduras, así como la importancia de establecer protocolos más rigurosos para la protección de menores en situaciones de riesgo.
La comunidad médica local ha expresado su consternación ante estos acontecimientos, señalando la importancia de identificar y tratar oportunamente los trastornos mentales para prevenir desenlaces fatales como el ocurrido en San Pedro Sula.
Las autoridades continúan recabando evidencias y testimonios para esclarecer completamente las circunstancias que rodearon este lamentable suceso que ha conmocionado a la sociedad hondureña.
