Tegucigalpa – El Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA) hace un llamado a los países centroamericanos para que refuercen sus programas de vigilancia epidemiológica ante la propagación de la enfermedad del gusano barrenador, que ha afectado a Panamá y Costa Rica hasta el momento.
A través de un comunicado, OIRSA, con sede en El Salvador, solicita un aumento en la vigilancia en «zonas de mayor riesgo de introducción del gusano barrenador del ganado». Esta medida busca evitar que la enfermedad se propague a otros países de la región.
Además, el organismo insta a fortalecer los controles de movilización de animales susceptibles y a transportar únicamente animales sanos. Se sugiere incrementar las inspecciones de animales antes de su embarque y al momento del desembarque para prevenir la diseminación del gusano barrenador.
Para complementar estas acciones, se promueven campañas de educación sanitaria dirigidas a productores y al público en general. La divulgación adecuada de información es esencial para que todos los actores involucrados estén conscientes de los riesgos y las medidas preventivas.
Adicionalmente, se enfatiza la importancia de notificar oportunamente a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) en caso de un posible brote de gusano barrenador. Esta medida permite alertar a otros países y tomar las medidas sanitarias necesarias para evitar una propagación descontrolada.
El OIRSA reafirma su compromiso de dar seguimiento a los informes emitidos por el Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA) de Panamá, el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) y la OMSA. Además, se compromete a notificar de manera oportuna a las autoridades sanitarias oficiales para una acción coordinada y eficiente.
En Costa Rica, se ha confirmado el primer caso de gusano barrenador en más de dos décadas, detectado en un perro en el cantón de Corredores, fronterizo con Panamá. Ante esta situación, las autoridades de ambos países están tomando medidas para contener la propagación de la enfermedad.
El gusano barrenador es una enfermedad causada por las larvas de una mosca que deposita sus huevos en heridas abiertas de animales de sangre caliente, incluyendo a las personas. Las larvas se alimentan del tejido vivo, lo que puede causar graves problemas de salud.
Panamá ha emitido un decreto de emergencia debido al incremento de casos en el país, y el Senasa ha intensificado las acciones en los puestos fronterizos para prevenir la entrada y diseminación de la enfermedad. La cooperación entre los países de la región es crucial para enfrentar este desafío y proteger la sanidad agropecuaria en Centroamérica.
Con información de EFE