Tegucigalpa – El pastor hondureño, Alberto Solórzano, quien fue miembro de la desaparecida Comisión de Depuración y Transformación de la Policía Nacional, habría salido de Honduras rumbo a Estados Unidos para pedir asilo político por haber recibido supuestas amenazas a muerte, informó este lunes el titular del Foro Nacional de Convergencia (Fonac), Omar Rivera.
En declaración para medios nacionales, Rivera brindó detalles sobre la gestión de asilo que realiza Alberto Solórzano, quien, desde el 22 de enero de 2022, cinco días antes de la investidura de Xiomara Castro como presidenta de Honduras, salió del país por supuestos «asuntos de trabajo».
Según Rivera, desde el primer día del gobierno de Castro se le retiró la seguridad a los exmiembros de la comisión depuradora.
«Cualquiera haría lo mismo teniendo enemigos, teniendo amenazas, de quienes fueron narcotraficantes, asesinos, sicarios, delincuentes, evidentemente cualquiera tiene miedo», comentó el titular del Fonac.
Una fuente que integró la Comisión de Depuración y Transformación de la Policía Nacional aseguró a un medio de comunicación que Estados Unidos «aprobó en primera instancia el asilo, es decir, le permitirá estar en su territorio mientras se emite una resolución».
Solórzano fue miembro de la comisión depuradora de la Policía Nacional que entre 2016 y 2020, durante el gobierno del expresidente Juan Orlando Hernández, separó al menos cinco mil policías por supuestos vínculos criminales o no reunir requisitos de idoneidad.
Lo acompañaron, en ese entonces, Omar Rivera y Vilma Cecilia Morales, expresidenta de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) entre 2002 y 2009, a quienes, de acuerdo a fuentes consultadas por Tunota.com, también se les quitó la seguridad estatal.
Durante el funcionamiento de la comisión depuradora, en 2016, el también pastor y asesor de ese ente, Jorge Machado, huyó del país luego de que desconocidos atentaran contra él cuando salía de su residencia, en Tegucigalpa; un ataque en el que perdió la vida un soldado que era parte de su seguridad.
En ese sentido, Rivera manifestó que «algunos valientemente desempeñamos funciones públicas, es lógico y respetuoso pensar que cualquiera prefiera preservar la vida con esos riesgos a los que nos enfrentamos».
Rivera cuestionó que se les quitara la seguridad a los depuradores, pese a que la Ley de Protección Especial de Funcionarios y Exfuncionarios en Riesgo Extraordinario ordena dar salvaguarda con elementos de las fuerzas públicas a quienes se hayan desempeñado en funciones públicas que pongan en riesgo su vida.
El artículo 3 de dicha ley menciona que los funcionarios y exfuncionarios sujetos a la protección especial del Estado tendrán seguridad, y entre ellos se incluye a los miembros y asesores de las comisiones especiales nombradas y que se nombren para «procesos de depuración y transformación de la Policía Nacional y los demás entes operadores de justicia».
Además, la ley indica que, para efectos de garantizar el período de la prestación de los servicios se establece que los depuradores tendrán seguridad durante el ejercicio de sus funciones y al cesar en el cargo por un período equivalente al tiempo que ejercieron.
La comisión depuradora de la Policía terminó funciones a inicios de 2022.
Solórzano fue criticado por defender algunas acciones en materia de seguridad del gobierno de Juan Orlando Hernández (2014-2022), quien actualmente enfrenta un juicio por narcotráfico en Estados Unidos y que se espera de inicio en abril de 2023.
A inicios de enero de 2022, Solórzano instó al nuevo Gobierno a «perdonar los incontables crímenes de la dictadura de Hernández» y posteriormente aseveró que «los hondureños no pueden hacer justicia siendo increpados por la sociedad».
Esas declaraciones fueron realizadas mediante un Facebook Live, donde constantemente hacía presencia, y donde también no volvió a aparecer desde el 15 de febrero, día en que se capturó con fines de extradición a Juan Orlando Hernández.
En una transmisión del 25 de enero, dos días antes de la asunción de Castro, Solórzano, quien dirigía el Centro Cristiano Internacional (CCI), anunció que estaría fuera del país por un «largo periodo por asuntos de trabajo».
Solórzano fue electo presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras (CEH) en 2010, cargo que ostentó por ocho años consecutivos.
