La Paz. – La histeria colectiva por la pandemia del coronavirus provocó que pobladores detuvieran y amarraran a dos policías que venían de afuera para visitar a sus familiares en la aldea Plan de Flores, municipio de Santa Elena, La Paz, región central de Honduras.
Los policías fueron identificados como Juan Antonio López y José Rodríguez Amaya asignados a la jefatura de Gracias, Lempira, quienes fueron despojados de sus armas de fuego, así como de el vehículo en que se transportaban, en un retén impuesto por los mismos vecinos de la zona.
Según informes, ambos tenían el fin de semana libre, por lo que se disponían a visitar a parientes que viven en la comuna donde les impidieron el paso.
Ante esta situación, un equipo de agentes de la Policía Nacional se acercó al lugar, y luego de un diálogo con pobladores, lograron rescatar a los oficiales.
Posteriormente, los llevaron hacia la sede de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), donde interpusieron una denuncia contra los ciudadanos que los privaron de su libertad.
Al consultarle sobre el bochornoso incidente, el alcalde del municipio, William Ventura, lamentó las acciones que asegura violan los derechos humanos a ambos policías.