Tegucigalpa – Los monitoreos realizados por Adecabah han detectado un fenómeno económico preocupante: mientras los precios de los carburantes experimentan reducciones, el costo de los alimentos continúa en ascenso. Según declaraciones de Adalid Irías, presidente de esta organización, el fin de semana se registraron aumentos en once productos de consumo habitual.
«Lamentablemente esos alivios que tienen los carburantes, no se refleja en la canasta básica», expresó Irías, quien manifestó su preocupación por esta disparidad que afecta directamente el poder adquisitivo de los hogares hondureños.
Entre los productos que han experimentado alzas en sus precios figuran alimentos básicos como los frijoles, además de verduras como el pepino y la remolacha. También se han registrado incrementos en diversos productos lácteos y en el limón persa, entre otros artículos de primera necesidad.
Este comportamiento del mercado ocurre en un contexto donde los combustibles registrarán, desde el lunes 3 hasta el domingo 9 de marzo, una leve rebaja. Esta representa la segunda disminución consecutiva tras una prolongada serie de incrementos que se mantuvo desde el año 2024.
Los defensores de los derechos del consumidor señalan que esta situación evidencia la falta de correlación entre la reducción de costos en el transporte y distribución de mercancías, y el precio final que pagan los consumidores en los mercados y supermercados del país.
La Adecabah continúa realizando monitoreos permanentes para informar a la población sobre estas variaciones y promover medidas que protejan el poder adquisitivo de las familias hondureñas frente a los constantes cambios en los precios de productos esenciales.