Tegucigalpa – La Sociedad Civil de Honduras, a través de la Asociación para Una Sociedad Más Justa (ASJ), expresó hoy su creciente preocupación ante el alarmante uso indebido de uniformes policiales en actividades delictivas en el país.
En un comunicado público, la ASJ manifestó su inquietud por los recientes incidentes violentos ocurridos en las principales ciudades hondureñas, donde individuos vestidos con uniformes policiales o réplicas de los mismos han estado involucrados en graves delitos.
Desde febrero hasta abril de 2024, se han reportado al menos cuatro incidentes violentos en Tegucigalpa y San Pedro Sula, donde personas ataviadas con uniformes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Dirección Policial Anti-Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (Dipampco) y Policía Militar, y armadas con armas de grueso calibre, perpetraron asesinatos y robos, resultando en la pérdida de al menos cinco vidas.
Además, en el mismo período, capturas y acusaciones en San Pedro Sula y Danlí revelaron la implicación de policías y agentes en casos de extorsión, secuestro agravado, robo y asociación para delinquir.
La ASJ enfatizó que si bien el Estado de excepción vigente ha otorgado a las autoridades mayores libertades operativas, también ha llevado a un debilitamiento del debido proceso.
En respuesta a esta preocupante situación, la ASJ instó a las autoridades de la Policía Nacional y el Ministerio Público a tomar medidas firmes para prevenir que las indumentarias oficiales lleguen a manos de grupos criminales.
Asimismo, resaltó la importancia de reforzar los controles internos de todas las unidades para evitar la sustracción de uniformes y armas, sancionando enérgicamente a quienes estén implicados en estos actos.
La implementación de estrategias integrales para una clara identificación de los oficiales, como placas, gafetes o fichas visibles, junto con el uso de cámaras corporales y en vehículos, podría mejorar significativamente la transparencia y documentar las acciones de los agentes en el cumplimiento de sus funciones.
La ASJ también hizo un llamado a promover campañas educativas periódicas que informen a la población sobre la correcta identificación de los oficiales de seguridad y los procedimientos a seguir al ser abordados por ellos.
Además, destacó la necesidad urgente de contar con un registro eficiente del armamento oficial, con sistemas de identificación de casquillos percutados para rastrear el uso indebido de armas en escenas del crimen.
La implementación de estas medidas es esencial para restaurar la confianza pública en las autoridades y garantizar que las fuerzas de seguridad sirvan y protejan a la ciudadanía en lugar de facilitar actividades criminales en el país.