Tegucigalpa – Este domingo, el diputado Rafael Sarmiento, miembro del gobernante Partido Libertad y Refundación (Libre) y originario de Olancho, anunció en una conferencia de prensa su renuncia al cargo de jefe de la bancada de Libre en el Congreso Nacional.
Sarmiento se convierte en el segundo parlamentario de Olancho en renunciar a un cargo directivo en el Legislativo en los últimos días.
La primera renuncia fue la de Carlos Zelaya, secretario del Congreso Nacional, quien dimitió después de admitir, tras su comparecencia ante el Ministerio Público, que en 2013 se reunió con narcotraficantes que le ofrecieron financiamiento para su campaña.
Rafael Sarmiento niega vínculos con narcotraficantes
El diputado Rafael Sarmiento, ha rechazado categóricamente cualquier vínculo con el narcotráfico, negando haber coordinado reuniones con personas involucradas en actividades ilícitas.
Sarmiento, originario del departamento de Olancho, aclaró que nunca ha sido mencionado en juicios relacionados con el narcotráfico en Nueva York y que no conoce a narcotraficantes.
En respuesta a las insinuaciones de Carlos Zelaya, quien también es parlamentario de Olancho y recientemente confesó haber participado en una reunión con narcotraficantes en 2013, Sarmiento sugirió que Zelaya podría estar confundido debido a la gran cantidad de reuniones y actividades de campaña en las que participó.
«Después de 11 años, realmente creemos que hay un error en lo que él ha manifestado», afirmó Sarmiento, subrayando que todas las reuniones que coordinó se llevaron a cabo en su departamento y fueron estrictamente relacionadas con la campaña política.
Sarmiento es el segundo diputado de Olancho en renunciar a un cargo directivo en el Congreso, tras la dimisión de Carlos Zelaya, quien admitió haberse reunido con narcotraficantes que ofrecieron financiamiento para su campaña.
A pesar de las declaraciones de Zelaya, Sarmiento insiste en que no estuvo involucrado en ninguna actividad ilícita y que su trabajo como miembro de la comisión de campaña fue siempre legítimo.
Las declaraciones de Sarmiento buscan distanciarlo de las recientes controversias que han sacudido al Congreso y al partido Libertad y Refundación (Libre), en un momento en que las acusaciones de vínculos con el narcotráfico han generado una profunda crisis en el entorno político hondureño.
La renuncia de Sarmiento añade más presión al partido Libre en un momento en que enfrenta cuestionamientos sobre la integridad de algunos de sus líderes.
