Tegucigalpa – Hugo Noé Pino, vicepresidente del Congreso Nacional, reafirmó que la nueva Ley de Justicia Fiscal no tendría impacto en el empleo ni en la inversión.
En cuanto a los opositores a la iniciativa, Noé Pino señaló que algunos sectores buscan amedrentar cuando sus intereses específicos se ven amenazados.
El economista recordó que la oposición a una legislación que no beneficia a determinados sectores es algo que sucede con frecuencia.
“Cada vez que a un sector específico se le afectan sus intereses particulares quiere asustar con el petate del muerto, diciendo que se va a acabar el empleo y que se va a acabar la inversión; nada de eso ocurrirá”, argumentó.
Argumentó que la Ley de Justicia Fiscal será una legislación que ajuste la situación a lo que han reconocido las autoridades fiscales a escala mundial.
Además, dijo, se reconocería que nuestra nación tiene demasiadas excepciones y exenciones.
El proyecto de ley aún se comparte y aún está en el Ejecutivo, según Noé Pino, pero podría sufrir algunos cambios.
El expresidente del Banco Central remarcó que si bien los detractores afirmaron lo mismo cuando se derogó la Ley de Trabajo por Horas, no aportaron pruebas que sustenten sus afirmaciones.
El gobierno aboga por una nueva Ley de Justicia Fiscal, con la que pretende, entre otras cosas, mejorar la distribución de la carga tributaria eliminando las exenciones otorgadas hasta por 40 años, eliminando el secreto bancario y condonando las deudas tributarias para evitar la legalización de la evasión fiscal.
Sin embargo, la propuesta de reforma tributaria no fue bien recibida por los empresarios, y esto los ha mantenido en desacuerdo con el gobierno.
