Washington. – El secretario de Justicia de Estados Unidos, William Barr, dejará el cargo el 23 de diciembre “para pasar las vacaciones con su familia”, anunció el lunes el presidente Donald Trump.
El presidente Trump dijo en un tuit que había sostenido “una reunión muy agradable” con Barr en la Casa Blanca, al tiempo que expresó: “Nuestra relación ha sido muy buena, ¡ha hecho un trabajo excelente!”.
Barr, agradeció en una carta haber trabajado en la administración republicana y elogió al presidente Trump: “Usted construyó la economía más fuerte y más resistente en la historia de Estados Unidos, una que ha traído un progreso sin precedentes a los que habían dejado atrás”.
El mandatario informó que el vicefiscal general Jeff Rosen ocupará el cargo en forma interina.
Barr estaba en el cargo de Secretario de Justicia desde febrero de 2019, antes había servido en el mismo puesto desde 1991 a 1993 bajo la administración del también republicano George H.W. Bush.
Tras las elecciones generales del 3 de noviembre, y antes las acusaciones hasta hoy no probadas de Trump de que los demócratas cometieron fraude, Barr autorizó a los fiscales federales a investigar “acusaciones sustanciales” de irregularidades en la votación.
El lunes 9 de noviembre, el fiscal principal de delitos electorales del Departamento de Justicia, Richard Pilger, envió un correo electrónico a sus colegas, indicando que “lamentablemente renunciaría” después de considerar el memorando de Barr “y sus ramificaciones”.
Flynn se enfrentó a una investigación por sus contactos con el Kremlin antes de asumir su cargo en la Administración Trump. El exmilitar confesó durante el proceso judicial haber mentido al FBI.
Luego de que los estados rechazaran decenas de demandas del equipo legal de Trump, Barr anunció a inicios de diciembre que no hubo fraude en las proporciones de que pudiera revertirse el resultado que le ha dado la victoria al exvicepresidente Joe Biden.
“Hasta la fecha, no hemos visto fraude a una escala que pudiera haber llevado a un resultado diferente en la elección”, dijo el jefe de la cartera de Justicia en una entrevista concedida a la agencia Associated Press.
La semana pasada Trump atacó duramente en público al fiscal Barr, al sugerir que con la entrada de Biden a la Casa Blanca “no pasará nada” respecto a las acusaciones lanzadas contra el Biden y su hijo por supuestas conversaciones con ejecutivos de una empresa de energía en Ucrania que habría intentado beneficiarse de la cercanía con el exvicepresidente demócrata.
“Si Biden entra, no les pasará nada a Hunter ni a Joe. Barr no hará nada, y el nuevo grupo de asesinos partisanos que entrará lo matará todo rápidamente. Lo mismo pasa con Durham. Los atrapamos fríos, espiando, traicionando y más (la parte difícil), pero “Justicia” tomó demasiado tiempo”, dijo Trump.
En su segundo período como secretario de Justicia, Barr trató de presentarse como un líder independiente que no se doblegaría ante la presión política. Pero los demócratas lo han acusado repetidamente de actuar más como el abogado personal del presidente que como el fiscal general, y Barr demostró ser un aliado confiable de Trump y un defensor del poder presidencial.
Antes de publicar el informe completo del fiscal especial Robert Mueller sobre la investigación de Rusia el año pasado, Barr enmarcó los resultados de una manera favorable a Trump, aunque Mueller dijo deliberadamente que no podía exonerar al presidente de obstrucción de la justicia.
También nombró como fiscal especial a un procurador federal que está llevando a cabo una investigación criminal sobre los orígenes de la investigación del FBI sobre las elecciones de 2016 que se transformó en la investigación de Mueller sobre una posible cooperación entre Trump y Rusia, luego de los repetidos llamados de Trump para “investigar a los investigadores”.
Barr también ordenó a los fiscales del Departamento de Justicia que revisaran el manejo de la investigación federal sobre el ex asesor de seguridad nacional de Trump, Michael Flynn, y luego buscó desestimar los cargos penales contra Flynn, quien se había declarado culpable dos veces de mentir al FBI. Posteriormente, Trump indultó a Flynn.
La ruptura de Barr con Trump por el fraude electoral no fue la primera. A principios de este año, Barr le dijo a ABC News que los tuits del presidente sobre los casos del Departamento de Justicia “me imposibilitan hacer mi trabajo” y las tensiones estallaron hace unos meses cuando los dos estaban cada vez más en desacuerdo sobre el ritmo de la investigación de Durham.
Trump había sido cada vez más crítico sobre la falta de arrestos y Barr le decía en privado a la gente que estaba frustrado por los pronunciamientos públicos de Trump sobre el caso.
También se dijo que Trump culpaba a Barr por los comentarios del director del FBI, Chris Wray, sobre el fraude electoral y la votación por correo que no coincidían con la retórica alarmista del presidente.
