Washington. – El secretario de Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, aseguró el martes que el gobierno está aún dispuesto a llegar a un acuerdo para aprobar un nuevo paquete de estímulo e inyectar capital a los pequeños comercios en medio de la recesión económica creada por la pandemia del coronavirus.
“Seguiremos trabajando con el Senado y la Cámara de manera bipartidista en la fase cuatro del paquete de estímulo”, dijo Mnuchin en una audiencia en la Cámara de Representantes.
El secretario Mnuchin expresó también que espera que se llegue a un acuerdo entre el partido Demócrata y el Republicano sobre la ayuda gubernamental. “Creo todavía que se debe alcanzar un acuerdo bipartidista” para suministrar “fondos sustanciales para las escuelas, para hacer pruebas diagnósticas, vacunas” y créditos a los pequeños comercios.
Las conversaciones entre los líderes políticos sobre un nuevo estímulo están estancadas desde principios de agosto, cuando ambas partes se levantaron de la mesa ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo.
Una resolución permitiría a los legisladores votar a través de otra persona sin estar físicamente en su cámara en el Congreso.
El paquete viene a reemplazar la ayuda federal anterior aprobada en mayo que expira el viernes 31 de julio.
Mientras tanto, los demócratas han rebajado su petición desde los 3,4 billones de dólares hasta los 2.2 billones, según propuso esta semana la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, la Casa Blanca sigue enrocada en su propuesta de 1.3 billones.
Mnuchin comentó sobre la discusión en la audiencia: “No apoyo los 2.2 billones”. El secretario del Tesoro, no obstante, dijo durante la audiencia que está dispuesto a sentarse con la presidenta de la Cámara “en cualquier momento” e incluso prometió llamarla en cuanto se acabara la sesión.
La ayuda de 600 dólares semanales que los millones de estadounidenses desempleados recibieron por cuatro meses expiró el 31 de julio y, a pesar de que Trump emitió una orden ejecutiva para extender los beneficios —reduciendo la ayuda a 400 dólares— los estados están luchando por hacer llegar el dinero a sus ciudadanos.
Por más de 20 semanas consecutivas, más de un millón de estadounidenses han solicitado beneficios de desempleo, mientras que los casos de coronavirus en EEUU superan los seis millones y se ha producido un repunte en estados del Medio Oeste.