San Pedro Sula, Honduras – En un histórico fallo que evidencia el fortalecimiento de la justicia hondureña contra el crimen organizado, Diomes Dagoberto Arita Cartagena, sicario vinculado a la temida organización «Los Pelones», recibió una condena de 34 años de prisión por múltiples delitos de homicidio.
La sentencia, dictada este martes por el tribunal de San Pedro Sula, marca un hito en la lucha contra las estructuras criminales que han azotado el territorio hondureño. Arita Cartagena, capturado durante la exitosa Operación Escudo Nacional II en abril de 2021, fue encontrado culpable de los homicidios de Luis Alberto Morales Pérez y Óscar Leonel Reyes, crímenes perpetrados en La Entrada, Copán, en febrero de 2020.
«Los Pelones», grupo criminal liderado por Marlon Josué Aguilar Tabora, mantenía estrechos nexos con el clan Valle Valle, cuyos cabecillas actualmente cumplen condenas en Estados Unidos por narcotráfico. Esta conexión destaca la relevancia internacional del caso y los avances en la desarticulación de redes criminales transnacionales.
En una serie de acciones judiciales paralelas que demuestran la intensificación de la lucha contra la impunidad, las autoridades también han logrado importantes avances en otros casos emblemáticos.
Oscar Roldán Flores Mejía fue declarado culpable por el triple homicidio de menores en Choloma, Cortés, mientras que Juan Alberto Pérez Viera y Luis Arturo Gómez Mejía fueron enviados a prisión preventiva por diversos delitos violentos. Adicionalmente, se formalizó la acusación contra Edwin Josué Cantarero Muñoz por su presunta participación en el asesinato de tres menores.
La Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FEDCV) continúa su labor incansable para llevar justicia a las víctimas y sus familias, demostrando que Honduras está fortaleciendo sus instituciones en la lucha contra el crimen organizado.
Las recientes sentencias y medidas judiciales evidencian el compromiso de las autoridades hondureñas por desmantelar las estructuras criminales que operan en el país, enviando un mensaje claro de que la impunidad no será tolerada en el territorio nacional.